El Plan de Sostenibilidad Turística en el Alto Asón ya es una realidad, y tiene un objetivo: ser una zona de turismo única en Cantabria

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El Plan de Sostenibilidad Turística en el Alto Asón es ya una realidad que está en marcha. Dotado con 1,2 millones de euros y formado por los municipios de Ampuero, Arredondo, Ramales de la Victoria, Rasines, Ruesga y Soba el objetivo es convertir a este destino del oriente de Cantabria en una referencia de turismo sostenible.

El Plan del Alto Asón quiere facilitar la mejora de la oferta existente y la creación de nuevos productos y estrategias que den aún más vida a los seis municipios. Entre las propuestas, quieren mejorar el aprovechamiento de sus recursos naturales, paisajísticos, culturales, etnográficos y gastronómicos. Estos seis municipios agrupados en la Mancomunidad de Municipios del Alto Asón se ubican en el Parque Natural de los Collados del Asón y cuentan con una amplia oferta de turismo activo.

Del presupuesto de 1,2 millones de euros, el 50% será aportado por la Secretaría de Estado (600.000 euros); el 40% por la Consejería de Industria, Turismo, Innovación, Transporte y Comercio del Gobierno de Cantabria (480.00 euros) y el 10% restante por la Mancomunidad (120.000 euros).

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Ahora los seis municipios tienen una visión conjunta como destino. Y claro, eso incluye una actuación que plantea una interconexión entre ellos, también para los visitantes. Los hilos conductores son claros: el paisaje, la naturaleza, los pueblos, las rutas y la gastronomía locales.

Hablamos de una zona que ocupa 453,2 km², aunque prácticamente el municipio de Soba constituye casi la mitad, en concreto 214,2 km². Ruesga (88), Rasines (42,9), Arredondo (42,8), Ramales de la Victoria (33) y Ampuero (32,9).

El patrimonio ambiental y paisajístico hacen de esta comarca un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza en estado puro. Aprovechándose de la naturaleza salvaje cerca de las ciudades y núcleos de población importantes como Santander y Bilbao, o Castro Urdiales, Santoña o Laredo, pretenden que la inversión madure como destino turístico y pase a ser lugar de renombre y paso en Cantabria.

Apostarán también por la digitalización y modernización de los servicios de flujo de visitantes, información y promoción turística. Eso también incluye la diversificación de la oferta de ecoturismo y recuperación y preservación medioambiental. También dando lugar a nuevas oportunidades y negocio en estos seis municipios.

En términos prácticos el trabajo ya ha empezado. Entre los atractivos, por ejemplo, habrá una tirolina sobre las cascadas del Gándara, o el acondicionamiento de la Senda del Asón como producto turístico sostenible que vertebre el territorio, con un recorrido de 48,5 km. También crearán nuevos productos gastronómicos, digitalizarán la atención al cliente e información turística, crearán una red integral de itinerarios naturales y un sistema de movilidad de vehículos eléctricos, con emisiones 0

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