El consejero de Salud, César Pascual, ha asegurado que la suspensión temporal del proceso de licitación del transporte programado de ambulancias iniciado por el Gobierno de Cantabria como consecuencia del recurso presentado por la Asociación de Empresas de Transporte Sanitario (AETRANS-Sanit) "no afectará a la prestación del servicio".
Pascual ha señalado que, "como ocurre habitualmente en la mayoría de concursos públicos, se producen recursos, bien a petición de alguna de las empresas o de las asociaciones que las representan, y su finalidad no es otra que la búsqueda de garantizar los derechos de todas las partes implicadas mientras el órgano competente se pronuncia".
"La tramitación de estos recursos es una parte habitual del procedimiento de contratación pública y las medidas cautelares que se toman son igualmente habituales", ha insistido en un comunicado el consejero, quien ha garantizado que, mientras se adjudica el proceso, "la legislación ofrece mecanismos suficientes para garantizar que el servicio se siga prestando como hasta ahora hasta la adjudicación del nuevo procedimiento, una vez resueltas las cuestiones planteadas en el recurso".
Asimismo, ha remarcado que la decisión del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) de aceptar la medida cautelar solicitada por AETRANS-Sanit de paralizar el procedimiento de contratación "no afecta al plazo de presentación de ofertas", que finaliza el próximo 9 de febrero.
CRÍTICAS DEL PSOE
Por otro lado, el consejero ha aludido a las críticas formuladas ayer por el PSOE tras conocerse la paralización de la licitación, y se ha mostrado "sorprendido" con que este partido pida ahora a la Consejería internalizar el servicio para prestarlo con medios propios cuando "es lo contrario de lo que ellos decidieron hacer.
Y es que la pasada legislatura, con el Gobierno PRC-PSOE y los socialistas gestionando la Consejería de Sanidad, la prestación del servicio de ambulancias se licitó a empresas especializadas, "como se ha hecho siempre", ha remarcado Pascual.
Además, el titular de Salud ha criticado que en la tramitación de este concurso por el Gobierno anterior (2019-2023) "se tomaron decisiones muy cuestionables", como la de segregar el concurso en dos lotes, el del transporte urgente por un lado y el programado por otro, lo que provocó "que uno de ellos se adjudicara y el otro quedara desierto".
Una decisión "arbitraria" que, en su opinión, "no tiene sentido ni en términos de eficacia ni de calidad del servicio, siendo una fuente de constantes problemas".
Para resolver ese concurso del transporte programado que había quedado desierto, la actual Consejería de Salud decidió continuar con un procedimiento negociado, "previsto por la legislación vigente para circunstancias como estas", y ha asegurado que "el coste del servicio recogido en la licitación es el mismo que el de la licitación que inició el Gobierno anterior".
"No se produce aumento de coste respecto a la licitación anterior. La negociación se plantea sobre las mejoras de calidad ofrecidas por las empresas", ha recalcado Pascual, quien ha querido dejar claro que "en esta ocasión, a diferencia de lo que ocurrió con el anterior concurso que quedó desierto, el procedimiento ha contado con una amplia concurrencia de empresas interesadas en prestar el servicio".
