La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 55 años como presunto autor de un delito de maltrato animal, al presentar un perro que estaba bajo su cuidado una herida en el cuello por abrasión, de importantes dimensiones y un dedo de profundidad, por la que el animal tuvo que ser intervenido quirúrgicamente y que además requirió tratamiento veterinario.
En la inspección realizada en un terreno de Liencres (Piélagos), donde esta persona tenía más perros, se le han intervenido otros nueve, por carecer de las mínimas condiciones higiénico sanitarias, incumpliendo diferentes preceptos de la Ley de Bienestar Animal.
Los agentes también comprobaron que la mayor parte de estos perros, de diferentes razas, no cumplían con el calendario de vacunaciones.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Cantabria fue informado este mes de la presencia de un perro de raza pastor belga malinois vagando por Liencres, que tenía una importante herida en el cuello.
Localizado el animal, los Servicios del Ayuntamiento de Piélagos se hicieron cargo del mismo, que necesitó atención veterinaria por las lesiones que presentaba.
En la zona dorsal del cuello se podía ver una herida abierta de unos 15 centímetros de longitud y una profundidad que alcanzaba el tamaño de un dedo, que para su curación necesitaba de una intervención quirúrgica y posterior tratamiento veterinario. Esta lesión por abrasión pudo haberse producido por haber estado atado a una cuerda o cable durante largos periodos de tiempo.
Averiguada la identidad de la persona que cuidaba del perro, los efectivos del SEPRONA realizaron una inspección, junto con veterinarios del Gobierno de Cantabria, en un terreno de Liencres donde el ahora detenido tenía más perros, y tras verificar la falta de condiciones higiénico sanitarias para el cuidado de estos animales, se procedió a la intervención de nueve perros, que también fueron recogidos por el Ayuntamiento.