Del 1 al 3 de diciembre tiene lugar en nuestra tierra uno de los eventos de espeleología más importantes del país. Se trata del simulacro nacional espeleosocorro 2023. Para entender la magnitud del evento hemos hablado con Diego González Peña, jefe de equipo y responsable logístico de ESOCAN, la Fundación de Espeleosocorro Cántabro.
ESOCAN ha sido protagonista de algunos rescates de renombre en Cantabria, como los del sistema Cueto-Coventosa donde se perdió un equipo portugués y demoraron 20 horas en rescatarlo ó el de las chicas catalanas que se perdieron en la cavidad.
Un simulacro que dice, congrega a cerca de 200 socorristas, todos ellos miembros de este tipo de asociaciones de todas las comunidades autónomas, además de 15 miembros de la UME y otros 20 de la Guardia Civil. El lugar elegido es un entorno idílico a la par que peligroso, el sistema del Gándara.
Entrarán a las 09.00 horas del sábado día 2 y saldrán el domingo día 3. “Recrearemos un accidente a más de cinco horas de progresión dentro de la cueva”, comenta, y solo los números impresionan: “Estimamos unas 15 o 16 horas de rescate desde que entra el equipo médico hasta que se saque la última camilla, si todo va bien”.
“Nunca se había hecho un rescate tan, tan grande”, ilustra Diego, que narra que “un rescate en esta misma cueva de 12 kilómetros y 200 metros tiene una travesía que empieza en el Alto de Lunada y acaba justamente en la cola de caballo del Asón, y si pasase algo en mitad de la travesía, necesitaríamos más de 200 personas”.
Para el simulacro de rescate, González Peña explica que “hemos cogido la mitad”. Se montarán “tres puestos sanitarios dentro de la propia cueva con tres médicos, y otro exterior por si ocurre cualquier caso. También enfermeros, y diez equipos de intervención, cada uno con 12 personas”.
Mientras, el puesto de mando logístico estará en el pabellón del pueblo de La Gándara. Allí estará dispuesto un puesto sanitario, de mando, logístico, un comedor, dormitorio...
