Cáritas Diocesana de Santander ayudó a unas 10.500 personas en 2018 en un año en que los fondos recibidos cayeron un 18%

photo_camera CANTABRIA.-Cáritas Diocesana de Santander ayudó a unas 10.500 personas en 2018 en un año en que los fondos recibidos cayeron un 18%

Cáritas Diocesana de Santander ayudó en 2018 a 10.479 personas, aproximadamente un 12,7% menos que el año anterior, con un incremento del número de mujeres, que fueron el 61% por ciento, para lo que destinó casi 2,46 millones de euros en un año en que se redujeron en torno a un 18% los fondos recibidos.

El perfil del beneficiario de Cáritas Diocesana de Santander sería una mujer, de entre 30-50 años y con hijos a su cargo, y, en algunos casos, al frente de familias monoparentales.

Estos son algunos de los datos que se reflejan en la Memoria 2018 presentada este jueves, en rueda de prensa, por la directora de Cáritas de la diócesis de Santander, Sonsoles López, el secretario general de la entidad, Francisco Sierra, y el obispo de Santander, Manuel Sánchez Monge.

Concretamente, fueron 4.015 personas las que acudieron directamente al servicio pero la entidad estima que por cada una de ellas se benefician 2,61.

En cuanto al número de intervenciones, ascendieron a unas 28.000, lo que representa una media de siete por cada participante.

Del total del presupuesto invertido, más del 41% se destinaron a cuestiones básicas, como el acceso a alimentación, ropa, calzado y enseres personales, pero también a derechos que, según Cáritas, están aún "poco garantizados", como el acceso a una vivienda o los gastos que la misma lleva implícita.

A alimentación, ropa, calzado y otros enseres personales se destinaron 370.000 euros; 203.000 a gastos de vivienda y vinculados al hogar; 28.000 a ayudas al transporte; 24.000 a las relacionadas con la educación, sobre todo las dedicadas a la compra de libros, y 23.000 a las vinculadas a la salud, como el pago de medicinas, ortopedia y dentista.

Según han explicado, las partidas dedicadas a las ayudas a la salud son las únicas que han aumentado respecto a 2017, en el que se dedicaron 21.000 euros, 2.000 menos que este año.

MÁS RECURSOS DESTINADOS INVERTIDOS QUE RECIBIDOS

Los recursos económicos obtenidos por Cáritas Diocesana de Santander alcanzaron los 2,37 millones de euros en 2018, menos de lo que invirtió en ayudas (2,46 millones).

De los fondos recibidos, en su mayoría (83,74%%) se obtuvieron a través de fondos privados, como Cáritas Española (208.000 euros), que aportó un 73,35% más que en 2017; la Fundación Botín (25.000) o Bankia, que destinó 10.000.

Las aportaciones públicas supusieron el 16,3% del total de fondos recibidos por Cáritas Diocesana de Santander. Entre las subvenciones públicas, destacan los 382.500 euros aportados por el Gobierno de Cantabria, que crecieron un 37,54%, aunque hay que tener en cuenta que en este año es la Administración regional la que aporta los fondos de la campaña del IRPF.

El Ayuntamiento de Santander, aportó en 2018 un total de 14.500 euros, un 158,5% más que en 2017; y el Consistorio de Arnuero, 3.000.

LA POBREZA, CON "ROSTRO DE MUJER"

En la rueda de prensa, el secretario general de la entidad ha señalado que la Memoria 2018 revela que la pobreza lleva "rostro de mujer".

Así, según revela la memoria presentada, se ha producido un incremento en el peso de las mujeres en el volumen de personas atendidas y ya suponen un 61% del total --dos puntos porcentuales más que en 2017-- frente al 39% de hombres.

El obispo de Santander también ha incidido en la "feminización de la pobreza", en el que hay más mujeres que hombres en situación de pobreza o la padecen de una formas "más severa".

Entre las causas, ha señalado al empleo, que, según ha dicho, en el caso de las mujeres es "más estacional y se destruye con mayor rapidez", y también a la diferencia en la cuantía de las pensiones que reciben hombres y mujeres, que, según ha dicho, se incrementa año a año en términos absolutos.

Por otra parte, el secretario de la entidad ha aludido también a la precarización del empleo y ha señalado que, entre los beneficiarios de las ayudas de Cáritas Diocesana de Santander, hay personas en paro pero también otras que tienen trabajo.

'¿HAY ALGUIEN AHÍ?'

La directora general de Cáritas ha agradecido a los 672 voluntarios de la entidad, a las que ha descrito como "personas comprometidas con cambiar el mundo" en un tiempo de "encrucijadas" y "retos" que han decidido "dar su vida" para acompañar y escuchar a aquellos que han sido "descartados".

Además, López ha hecho un llamamiento a no quedarse "solo con la cifra" de beneficiarios de las ayudas de Cáritas sino también "de ver la cara" de estas personas.

Para ello, Cáritas Diocesana ha presentado la Memoria 2018 bajo el lema '¿Hay alguien hay?', una pregunta que, según ha señalado el secretario general de la entidad, "nos interpela, nos cuestiona, nos anima a bucear en lo trascendente y también nos invita a preguntarnos quiénes son las personas que a pesar de estar no vemos".