Santander adjudica a Légamo por 45,5 millones el contrato de Parques y Jardines

La Junta de Gobierno local de Santander aprobará hoy adjudicar a Légamo Infraestructura Verde en 45,5 millones el contrato de Parques y Jardines por cuarto años, prorrogables por uno más, según ha anunciado en rueda de prensa la alcaldesa, Gema Igual, que ha precisado que la empresa tiene 15 días para formalizar el contrato y comenzar la prestación del servicio.

Légamo, filial del grupo que Urbaser, se ha hecho con el nuevo contrato para el servicio de conservación y limpieza de la infraestructura verde de la ciudad --conocido como parques y jardines--, al que optaron nueve empresas, y que salió a licitación por 12,7 millones al año. Su oferta era de 11,3 millones al año, un 10,8% menos del precio de licitación, de forma que el Ayuntamiento pagará 948.000 euros al mes.

El anterior contrato fue adjudicado a Urbaser en 2012 por 7,9 millones al año, si bien ambos no son comparables porque el nuevo actualiza los sueldos y genera 45 puestos de trabajo, e incorpora elementos a atender (bancos, jardín vertical, control de especies invasoras, áreas biosaludables) e incrementos, como el del 30% de la zona verde a mantener, parte de la cual corresponde al Instituto Municipal de Deportes (IMD).

Entre las nuevas mejoras que ha incluido en la oferta la concesionaria se encuentran 630.000 euros para el sistema de telegestión del riego de las zonas verdes; 200.000 euros para la adecuación de las áreas de juegos infantiles a la normativa vigente; y 50.000 euros para la adecuación de las instalaciones de los viveros municipales.

El contrato de Parques y Jardines 2022-2026 se ocupará del mantenimiento de los cuatro millones de metros cuadrados de espacios verdes y zonas ajardinadas de Santander, que son 850.000 metros cuadrados más que en el anterior contrato.

Respecto del contrato de 2012 supone un incremento del 30% en zonas atendidas al incluir, por ejemplo, los espacios verdes del IMD, así como las zonas verdes que se han incorporado a la ciudad en los últimos diez años.

También se ocupará del mantenimiento de los 34.000 árboles que tiene Santander, las áreas singulares --como el jardín vertical--, los 141 parques infantiles y biosaludables (un 15% más que en el anterior contrato), los 5.097 bancos de la ciudad --antes no estaban incluidos--, los 36.475 metros cuadrados de zonas caninas, y las 116 fuentes de agua potable y seis ornamentales --tampoco figuraban en el anterior--.

Se contempla un parque de 261 vehículos nuevos sostenibles, y respecto al personal, se estima que durante los próximos cinco años el servicio debe contar con 238 trabajadores, que son 45 puestos más que los estimados hace diez años, cuya formación se optimizará.

Además se tratarán de manera especializada y particularizada las diferentes zonas verdes de la ciudad atendiendo al uso, tipología, podas o cuidados.

Así, habrá doce especializaciones que son arbolado; calle verde (como la avenida de Los Infantes, con árboles a ambos lados); calle verde de uso intensivo (como la Alamenda de Oviedo); infraestructura ajardinada (Los Castros); infraestructura naturalizada (como la autovía de la S-20); estructura verde (como el aparcamiento del faro y su entorno); estructura verde de uso intensivo (cuando se mezclan parques y plazas); parque periurbano (como Los Pinares o el parque Benidorm); parque urbano (Magdalena, Las Llamas o Mesones); espacio natural (como Cabo Mayor); espacio natural difícil (como el talud de Reina Victoria, el entorno del funicular de Entrehuertas o la senda de Peñacastillo); y el jardín vertical de Tabacalera.

Además, los pliegos recogen que cuando el volumen de nuevos espacios verdes se incremente un 3% se incorpore una actualización al contrato.

Por otra parte, se establece un control interno del contrato en el Ayuntamiento y otro externo.

El contrato de Parques y Jardines fue adjudicado a Urbaser en 2012 y estaba en vigor hasta 2018. Antes de su finalización, se redactaron nuevos pliegos y se presentaron empresas, proponiendo la mesa de contratación adjudicarlo a la UTE Imesapi-La Encina-Copsesa, si bien su plan económico-financiero no garantizaba cubrir los sueldos y las actualizaciones durante cuatro años, por lo que Urbaser ha continuado presentado el servicio hasta ahora.

Igual ha recordado que hubo un plan de control financiero con Urbaser, "donde hay reclamaciones en el juzgado que todavía no se han resuelto".