Buruaga (PP) anuncia que si es presidenta de Cantabria rebajará el IRPF y suprimirá el impuesto de patrimonio

14/4/23  SANTANDER
ep Cuca Gamarra 


La secretaria general del PP y la presidenta del partido en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, clausuran el acto de presentación del programa marco municipal para las elecciones del 28 de mayo

FOTO: Juan Manuel Serrano Arce
photo_camera 14/4/23 SANTANDER ep Cuca Gamarra La secretaria general del PP y la presidenta del partido en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, clausuran el acto de presentación del programa marco municipal para las elecciones del 28 de mayo FOTO: Juan Manuel Serrano Arce

La presidenta del PP y candidata autonómica, María José Sáenz de Buruaga, ha anunciado este miércoles que, si es presidenta de Cantabria tras las elecciones del 28 de mayo, "bajará inmediatamente" el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a las clases medias y trabajadoras y suprimirá el impuesto sobre el patrimonio.

"Nosotros sí. Nosotros vamos a bajar los impuestos a los cántabros. Lo llevo defendiendo toda la legislatura y lo voy a hacer", ha garantizado esta tarde Buruaga durante el acto de presentación de la candidatura del PP para Camargo, un municipio "joven que necesita empleo y muchas más oportunidades de trabajo estable".

Y para conseguir este objetivo en Camargo, y en general en toda la comunidad autónoma, ha apostado por "eliminar barreras a la economía, aligerar cargas burocráticas y bajar los impuestos".

Por ello, ha anunciado una "reorganización de la fiscalidad autonómica para aliviar todas las cargas fiscales que dependan del Gobierno, extendiendo a los hermanos la bonificación del impuesto de sucesiones que ya existe entre padres, hijos y cónyuges".

Además, ha indicado que la reforma fiscal incluye también una reducción del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y la eliminación del Impuesto de Patrimonio.

La presidenta ha opinado que "hay que dar oxígeno" a los hogares cántabros, a su juicio, "asfixiados por la presión fiscal de Revilla y Sánchez".

Según ha dicho, dicha presión fiscal ha subido un 17% en el último año, lo que supone más de 100 millones extra que la Administración "extrae de los bolsillos de los contribuyentes para engordar las arcas públicas y seguir despilfarrando en gasto improductivo".

Para la dirigente popular, "donde mejor está el dinero es en el bolsillo de las familias y empresas para hacer frente al coste de la vida, seguir adelante sin angustias provocadas por sus propios gobernantes y activar la inversión y el consumo".