Los espectadores del FIS crecen un 8% y superan los 30.000

El Festival Internacional de Santander (FIS) cerró su edición 68 con un crecimiento del 8% en el número de espectadores respecto al año pasado, superando la barrera de los 30.000 asistentes.
London Symphony Orchesta
photo_camera London Symphony Orchesta

Los 48 espectáculos programados han sumado unos ingresos por venta de entradas de 700.000 euros aproximadamente, frente a los 600.000 de la edición anterior.

Así lo ha informado hoy el festival, que ha atribuido el incremento en la recaudación al interés del público por una programación heterogénea, donde géneros como la danza, los recitales de lírica y piano, la creación contemporánea y la música barroca han alcanzado niveles de ocupación que se acercan a los de los grandes conciertos sinfónicos.

El crecimiento de público y taquilla de las últimas ediciones, que permitió el año pasado amortizar por completo la deuda que lastraba al Festival, ha continuado en esta edición con nuevos picos en las cifras de espectadores y recaudación.

Una vez consolidada la salud económica de la institución, los directores Jaime Martín y Valentina Granados continúan trabajando para convertir la marca del Festival de Santander en una garantía de calidad que permita a los espectadores acudir a espectáculos de alto nivel en cada uno de los géneros que integran la programación.

Los dos conciertos de Sir Simon Rattle y la London Symphony Orchestra fueron una de las cumbres de esta edición. La orquesta londinense regresará la próxima temporada como parte de la residencia de tres años firmada con el Festival. La presencia de una figura como el bailarín Carlos Acosta, que mostró sobre el escenario de la Sala Argenta los nuevos caminos por los que transita la danza, fue otro de los grandes momentos de esta edición.

"La reacción del público fue extraordinaria en las actuaciones del tenor Javier Camarena, de la pianista Maria Joao Pires, de Marc Minkowski con Les Musiciens du Louvre y del Ballet Flamenco de Andalucía", explica la directora ejecutiva Valentina Granados, sin olvidar la integral de los conciertos para piano de Beethoven, con Javier Perianes y la London Philharmonic Orchestra, que se convirtió en uno de los espectáculos con mejores índices de asistencia en esta edición.

También la veintena de críticos especializados que acudieron este verano al Festival se hicieron eco de las reacciones del público.

El Ciclo de Marcos Históricos, premiado en junio por la Asociación de Grupos Españoles de Música Antigua, tenía el listón muy alto, pero consiguió llenar iglesias y espacios singulares de toda Cantabria gracias a la presencia de grupos consolidados, como Al Ayre Español, La Grande Chapelle y Forma Antiqva, y otros emergentes como Cantoría y Dichos Diabolos.

La obra de teatro musical barroco 'Yo, Farinelli, el capón', que también contó con la música de Forma Antiqva, fue una propuesta innovadora que logró buenas cifras de asistencia. Esta coproducción del FIS y del Festival de San Lorenzo del Escorial, basada en la obra del periodista cántabro Jesús Ruiz Mantilla y dirigida por Manuel Gutiérrez Aragón, también contó con el apoyo de la crítica especializada.

"Estamos muy contentos porque el trabajo de todo el equipo del Festival de Santander durante los últimos años se ve premiado por el respaldo del público", valora la directora ejecutiva, Valentina Granados, sobre el aumento de espectadores. "Hoy en día nuestro mayor reto es no defraudar la confianza de ese público y conseguir que la persona que asiste a un espectáculo del Festival, del género que sea, disfrute de una actuación de primer nivel".