Revilla propone que el Gobierno y los bancos busquen una "fórmula" para los que no pueden pagar la hipoteca

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, cree que el Gobierno central y los bancos deberían ser "solidarios" y buscar "alguna fórmula" para la gente que no puede pagar las hipotecas dada la subida de la inflación, en un año "excepcionalmente bueno" para las entidades financieras.

"Que los accionistas en vez de percibir cuantiosos dividendos este año pues que se recibiera alguno menos", ha propuesto este jueves Revilla a preguntas de la prensa sobre el récord de resultados del Banco Santander, en los actos del Día Mundial de los Humedales en Noja.

Revilla ha señalado que "la mayoría" de las empresas han tenido unos beneficios "muy cuantiosos" a pesar de la crisis, mientras que para los ciudadanos en general son "malos tiempos" porque "están pagando la inflación".

A su juicio, el tema de los bancos "llama un poco la atención" y "habría que hacer un llamamiento" para que se tenga "un poco de sensibilidad", sobre todo en el tema de las hipotecas, aunque no de una manera generalizada porque "hay gente que puede pagarlas".

"Hay un colectivo en España ahora mismo que va a tener grandes dificultades para poder afrontar esas hipotecas, que pueden suponer con los tipos de interés actuales del orden de entre 300 y 400 euros al mes que para muchas familias va a ser insostenible", ha lamentado.

Desde su punto de vista, el Gobierno y las entidades bancarias debieran de "abrir un periodo de negociación" para "buscar alguna fórmula" para la gente que no puede pagar las hipotecas, y por lo tanto pueden llegar a perder sus viviendas, en un año donde para ellos ha sido "excepcionalmente bueno" y que los accionistas "en vez de percibir cuantiosos dividendos este año pues que se recibiera alguno menos".

"Hay que ser yo creo que solidarios y alguna fórmula debiera de buscarse para que no resulte escandaloso que en estos momentos veamos miles y miles de millones de beneficios de las principales empresas del Ibex y, sin embargo, pues tengamos una población de casi un 30 por ciento que está al borde entrar en un periodo que se puede considerar de riesgo para el mantenimiento de una mediana calidad de vida", ha propuesto.

Finalmente, ha reiterado que le parece "muy poco" que el salario mínimo llegue a los 1.080 euros y no entiende por qué las empresas ponen "el grito en el cielo".

"La subida esta que tanto se critica por parte de algunos empresarios no supone ningún incremento, los que van a cobrar 1.080 euros van a cobrar lo mismo que cobraban el año pasado porque se lo ha absorbido la inflación", ha apuntado.