El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha propuesto al Ministerio de Agricultura que priorice las ayudas que va a destinar a paliar la crisis del sector primario en la necesaria recuperación del sector ganadero, "que es una de las actividades que más perjudicada se está viendo por la actual crisis".
Blanco, que ha participado este jueves en el Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitarios, presidido por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha llamado también a la reflexión y a medir los tiempos a la hora de cumplir los objetivos climáticos de la Unión Europea sin que se vea perjudicada la seguridad alimentaria en los países comunitarios.
"Es necesario seguir trabajando en la consecución de los objetivos climáticos de la Unión, pero quizás sea necesaria una reflexión en relación con la ambición y los plazos, dada la situación en la nos estamos viendo. El impacto en nuestro sector agrícola puede pasar de ser una oportunidad a convertirse en un golpe mortal", ha remarcado.
Durante su intervención, ha destacado el reconocimiento que se ha hecho al sector agrario como uno de los grandes afectados por esta nueva crisis, si bien las ayudas destinadas al sector "siguen siendo insuficientes".
"Creemos que esta crisis debe servirnos para tratar de solucionar problemas estructurales del sector que se han visto agravados, y que las ayudas, aunque fuesen mayores, no pueden solucionar", ha subrayado.
Blanco ha aplaudido la decisión del Ministerio de concentrar esfuerzos en el sector lácteo, al que Cantabria, al igual que otras comunidades autónomas, ya ha destinado en la medida de sus posibilidades un apoyo adicional para compensar especialmente a los productores de leche de los incrementos de los insumos provocados por la crisis de la pandemia del coronavirus.
Tal y como ha explicado, "esta nueva ayuda es realmente bienvenida, pero si no agarramos el toro por los cuernos y buscamos los mecanismos reales que aseguren a los productores cobrar un precio justo por sus productos, todos estos esfuerzos no van a servir de nada".
Ha considerado necesario trabajar a nivel nacional para que la Ley de la Cadena Alimentaria se cumpla y que no se sigan produciendo ventas a pérdidas porque si no, "por muchas ayudas que pongamos encima de la mesa, la mayor parte de las explotaciones lácteas podrían acabar cerrando", ha dicho.
Un apoyo que ha pedido que se extienda a los productores de vacuno de carne, que también están sufriendo las consecuencias de este "incumplimiento sistemático", y ha vuelto a reclamar al ministro que se adopten medidas excepcionales que garanticen el incremento de los precios al productor. "Necesitamos conseguir un entendimiento nacional entre el sector ganadero, la industria y la distribución, sin que sea el pretexto de la Competencia el que nos lo impida", ha insistido.
El consejero se ha mostrado partidario de concentrar las ayudas al sector en las actividades más perjudicadas "para no atomizar los importes y que la ayuda no pierda su eficacia, por lo que ha apostado por concentrar esas ayudas en sectores PAC".
Por ello, ha propuesto que se centren en el sector del vacuno, tanto de leche como de carne, al estar "suficientemente acreditado" que los tradicionales problemas del sector "se están viendo seriamente agravados por el incremento exponencial del coste de los insumos derivados de las perturbaciones del mercado provocadas por la invasión de Ucrania".
Ha lamentado que los insumos que forman parte del coste de producción de una explotación se han incrementado de forma "muy considerable", tales como la energía (eléctrica y de gas), el gasóleo agrícola, los fertilizantes y los plásticos.
"Si no se otorgan ayudas urgentes y suficientes al sector vacuno, se corre un serio riesgo de abandono de un sector considerado como estratégico, al no ser capaces los productores de trasladar sus costes de producción al mercado y a la cadena alimentaria, obligando al abandono del sector a miles de productores que no pueden seguir produciendo a perdidas", ha afirmado Blanco.
Teniendo en cuenta que el sector lácteo, ya identificado por el Ministerio como el más perjudicado y por ello sus productores van a recibir un trato diferenciado, con una ayuda específica de 169 millones de euros, el consejero ha expresado su apoyo para que los fondos de la reserva de crisis planteada por el Ministerio se centren en el sector de vacuno de carne.
Finalmente, ha considerado que las ayudas destinadas a los buques de pesca para paliar el incremento del gasóleo -18 millones de euros, de los cuales Cantabria recibirá 400.000 euros- "no van a ser de gran ayuda" y ha considerado que el resto de ayudas serán de utilidad en la medida en que suban los precios, como ocurre en otras cadenas.
