Los 14 alumnos de los cursos de Incorporación a la Actividad Agraria del CIFA reciben sus diplomas

Los 14 alumnos que han participado en la última edición de los cursos de Incorporación a la Actividad Agraria organizados por el Centro de Investigación y Formación Agrarias (CIFA), han recibido este martes sus diplomas de acreditación en Gestión de Explotaciones de Vacuno de Ganadería Extensiva y Gestión de Explotaciones Hortofrutícolas.

Estas acreditaciones han sido entregadas a los alumnos en un acto en la sede del CIFA y tras haber superado unos cursos que, además de conocimiento, les han aportado la capacitación para poder beneficiarse de las ayudas del Programa de Desarrollo Rural de Cantabria.

El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha felicitado a los alumnos y ha afirmado que los jóvenes ganaderos y agricultores representan la "principal herramienta para luchar contra el despoblamiento del medio rural" de Cantabria.

Por ello, se ha mostrado partidario de potenciar la cualificación profesional del sector primario con el fin de impulsar su desarrollo en Cantabria, así como promover el relevo generacional en beneficio del desarrollo del sector productivo, la mejora de la innovación y de la competitividad, además de la propia supervivencia de las explotaciones.

En el acto de entrega de diplomas también ha participado la directora general de Desarrollo Rural, Marisa Pascual.

Además de su labor investigadora, el CIFA organiza todos los años diferentes cursos de formación agraria para hacer llegar a los profesionales del sector y a quienes pretenden serlo los conocimientos necesarios para que puedan desarrollar la actividad en las mejores condiciones.

El CIFA nació en 1969 como Centro Regional del Servicio de Extensión Agraria. Inicialmente se especializó en la asesoría técnica y más tarde, a partir de la transferencia de la competencia en investigación agraria, asumió también esta función.

En este centro se desarrollan proyectos de investigación finalista, experimentación e innovación tecnológica, al objeto de encontrar soluciones a los problemas de sector agrario, explica el Ejecutivo cántabro en un comunicado.

Entre otras funciones, el centro imparte cursos de incorporación en especialidades tan diversas como la apicultura, el cultivo bajo abrigo, la cunicultura, la helicicultura, los pequeños frutos, las explotaciones piscícolas, la ganadería, extensiva, las explotaciones hortofrutícolas y las explotaciones de vacuno de leche.

Además, organiza acciones de capacitación relacionados con el aprendizaje de técnicas agrarias, la elaboración de productos y su comercialización en ámbitos como la viticultura y la cata de vinos, los frutales de hueso y pepita, la horticultura y las catas de hortalizas, el ordeño a nivel de granja, la toma de muestras para transportistas de leche, los terrenos comunales, la producción y el manejo ovino-caprino de leche, la elaboración y cata de quesos, la leche y cata de leche, el cultivo y la utilización de plantas aromáticas, medicinales u ornamentales, entre otros.