Los diputados José Ramón Blanco y Alberto Bolado han pedido a su todavía compañera de Podemos en el Parlamento que "reconsidere" su decisión de abandonar, y con ello "dinamitar" -dicen-, el grupo.
En un comunicado, ambos parlamentarios han advertido de que su marcha -asunto que abordará este martes la Mesa- tendrá consecuencias "muy serias" que afectan "directamente a los intereses" de los cántabros.
En su reunión, el órgano de gobierno de la Cámara tramitará el escrito de la podemita en el que comunica su voluntad de abandonar el Grupo al que había pertenecido y del que había sido portavoz hasta finales de diciembre, cuando fue cesada del cargo en una reunión promovida por Bolado y que contó con el apoyo de Blanco.
El abandono de Ordóñez -a raíz de la situación generada y los acontecimientos acaecidos desde que denunció por acoso laboral a Blanco- supone la desaparición del Grupo Podemos, ya que ella pasaría a ser no adscrita y los morados se quedarían con dos escaños, uno menos de los necesarios para constituir grupo propio, por lo que Blanco y Bolado se integrarían en el mixto.
A este respecto, ambos señalan que con el término de 'no adscrito' se denomina técnicamente, y según el Reglamento del Parlamento, a los diputados que no pertenecen a ningún grupo y que, por tanto, se consideran tránsfugas.
INICIATIVAS QUE DECAERÁN
Al margen del "deterioro innegable" de la imagen del partido y de la "crisis institucional" que, a juicio de ambos parlamentarios, provoca la decisión de Ordóñez, algunas de las iniciativas presentadas por Podemos podrían acabar decayendo.
Algo que "con total seguridad" -vaticinan- ocurrirá con la ley para 'poner coto' al fracking en Cantabria o la que regulará el derecho a la vivienda en Cantabria, norma promovida por la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) y presentada en el Legislativo por Podemos y el PSOE.
Para Bolado y Blanco la tramitación de estas normas constituye un "mandato expreso" de los votantes en las elecciones de 2015 y son propuestas "fundamentales" del programa con el que concurrieron a los comicios. Por eso, sostienen, "deben ser nuestra máxima prioridad anteponiéndola a intereses particulares o personales".
En consecuencia, piden a Ordóñez que tenga "altura de miras" y reconsidere su decisión, pues como insisten acarrearía consecuencias "muy negativas" para el bienestar de la sociedad.
"No es admisible que las diferencias personales estén por encima de los intereses de la ciudadanía a la que poco o nada le preocupan las luchas internas para la elaboración de las listas electorales", abundan Bolado y Blanco, antes de admitir que "cada uno tiene sus preferencias sobre quién podría ser la mejor candidata de Podemos a la presidencia de Cantabria", proceso paralizado cautelarmente por un juez y al que concurrían Ordóñez y quien fue secretaria general, Rosana Alonso, hasta principios de año, cuando Madrid nombró una gestora en Cantabria.
"Estas guerras internas no pueden eclipsar por completo todo el trabajo desempeñado a lo largo de estos años o, lo que es peor, paralizar el trabajo que queda por hacer donde cuestiones como el derecho a la vivienda o la protección del medio ambiente van a seguir centrando gran parte de nuestros esfuerzos. Todavía estamos a tiempo y por eso le pedimos a Ordóñez que rectifique y no lo eche todo por la borda", insisten los dos podemitas.
FRENAR UN GOBIERNO A LA ANDALUZA EN CANTABRIA
Para finalizar, apuestan por "lograr el objetivo de frenar un gobierno a la andaluza en Cantabria". "Está muy claro que sin Podemos en el Parlamento, sería mucho más fácil un gobierno de Partido Popular, Vox y Ciudadanos que supondría un retroceso que Cantabria no se puede permitir y en nuestra opinión estos son motivos más que de sobra para que Ordóñez dé marcha atrás", concluyen Bolado y Blanco.
Este último este pendiente de la respuesta, entre otras cosas, al recurso que presentó cuando Podemos Cantabria le suspendió cautelarmente de militancia junto a Ordóñez, cuya afiliación ya ha sido restituida por el partido.
