La plaza del Ayuntamiento de Santander ha acogido este mediodía un minuto de silencio en recuerdo de la mujer de 38 años asesinada presuntamente por su cónyuge, el pasado 8 de enero, en Navarra.
Miembros de la Corporación santanderina, trabajadores y ciudadanos se han sumado a este acto de repulsa, que ha estado presidido por el concejal de Igualdad, Álvaro Lavín.
Se trata de la primera víctima de violencia machista de 2022 y del segundo minuto de silencio que se celebra en Santander en lo que va de año, tras recordar el pasado día 4 a la menor asesinada por su padre en Madrid, el 30 de diciembre.
Lavín ha trasladado el pésame de la ciudad a los familiares y allegados de la mujer asesinada y ha pedido a los vecinos que se impliquen en la lucha para desterrar esta lacra de la sociedad.
En este sentido, ha instado a los santanderinos a denunciar cuando tengan la más mínima sospecha de un caso cercano, para ayudar a las víctimas y arrinconar a los agresores.
El edil, que ha detallado que la joven no tenía hijos menores ni existían denuncias previas contra el agresor, ha abogado por redoblar esfuerzos, no bajar la guardia y ampliar los medios a disposición de las mujeres que sufren violencia machista.
"Tenemos la obligación moral de acorralar socialmente a los asesinos y la responsabilidad de ayudar a las víctimas a romper el silencio y a protegerlas, para que puedan salir adelante sin miedo", ha agregado.
Por último, ha apostado por la sensibilización y educación en igualdad, y ha recordado que las víctimas disponen del teléfono 016 y pueden acudir a los servicios sociales municipales o al Punto de Atención Integral a la Violencia (PAIV), ubicado en el Centro de Igualdad (General Dávila, 124, Centro Cívico María Cristina).