El Ayuntamiento de Santander ha aprobado dos nuevas remesas de ayudas dirigidas a comunidades de propietarios del municipio para la realización de obras en fachadas y la instalación de ascensores por importe global de casi 89.000 euros.
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento ha dado el visto bueno a la concesión definitiva de esta subvención para cuatro comunidades y un inmueble, a los que se destinarán unos 38.000 euros, así como la concesión provisional de casi 51.000 euros para la reforma de otras cinco fachadas.
Así, las ayudas se destinarán a las comunidades de propietarios de las calles San José 12 y Ramón y Cajal 52, que realizarán obras en sus fachadas y recibirán unos 4.900 y unos 1.775 euros, y al inmueble de la calle Medio 21, que contará con una subvención de aproximadamente 4.800 euros.
A la comunidad de propietarios de la calle Perines 39 se le concederá una ayuda de casi 20.000 euros para la instalación de un ascensor, mientras que la comunidad de la calle Rosa 3 recibirá 6.750 euros.
Por su parte, los vecinos de Menéndez Pelayo 86 recibirán unos 11.000 euros para el mantenimiento de todas las molduras y composición original de la fachada, así como de la composición y materiales de carpintería exterior.
El número 30 de la calle Pereda recibirá más de 16.500 euros para el mantenimiento de molduras, forja y carpintería exterior, mientras que el 14 de la calle La Braña reformará su fachada y recibirá una ayuda de casi 11.800 euros para el mantenimiento de todas las molduras y composición original.
Por último, al número 20 de Ruamayor se destinarán más de 3.600 euros para el mantenimiento de molduras y composición exterior y la retirada de tendederos y antenas de televisión, así como unos 8.000 euros al inmueble número 19 de Cervantes, para retirar antenas de televisión de fachada.
El concejal de Fomento, Movilidad Sostenible y Vivienda, César Díaz, ha señalado que estas ayudas, aprobadas en Junta de Gobierno, se destinan a la rehabilitación de fachadas de edificios catalogados por el planeamiento y prevén subvenciones tanto para obras generales (revocos, enfoscados, pintura, arreglo de balcones) como para trabajos especiales (recuperación de elementos arquitectónicos y arreglos que requieran mayor especialización).
En el caso de las ayudas de ascensores, se dirigen a fomentar la instalación de este tipo de equipamientos en edificios preexistentes que carecen de él, mejorando con ello la accesibilidad para sus residentes.
Según ha destacado, estas ayudas "incentivan la mejora y el mantenimiento de edificios catalogados y suponen un estímulo para las comunidades que deben afrontar este tipo de actuaciones".
