La FESNAD considera que el consumo moderado de cerveza podría formar parte de una alimentación equilibrada

El consumo moderado de cerveza podría formar parte de una alimentación equilibrada, por las propiedades que le confieren las materias primas con las que está elaborada.

El consumo moderado de cerveza podría formar parte de una alimentación equilibrada, por las propiedades que le confieren las materias primas con las que está elaborada.

Así lo ha asegurado la presidenta de la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD), Ascensión Marcos, en la ponencia sobre 'Evidencias científicas sobre el consumo moderado de cerveza', que ha impartido a médicos de atención primaria de Cantabria, ha informado en nota de prensa el Centro de Información Cerveza y Salud.

Marcos es autora del estudio '¿Influye la cerveza en el aumento de peso? Efectos de un consumo moderado de cerveza sobre la composición corporal', del que se desprende que, frente a lo que suele creerse, el consumo moderado de bebidas fermentadas no está relacionado con sufrir obesidad, ya que el aporte calórico de estas bebidas es bajo.

Así, la causa de ese sobrepeso no estaría en la bebida, sino en los malos hábitos alimenticios, la vida sedentaria e incluso la genética, según dicho estudio.

En la conferencia, Marcos hizo referencia a algunos de esos estudios, entre los que destaca el titulado 'Asociación entre el consumo moderado de cerveza tradicional y sin alcohol y la composición corporal', con el que se observó que un consumo moderado de cerveza, ya sea tradicional o sin alcohol, no provocaba aumento de peso ni modificaciones en la composición corporal entre el grupo analizado.

Además, las mediciones antropométricas realizadas a los participantes no mostraron cambios en la circunferencia del brazo, cadera y cintura, ni alteraciones significativas en los pliegues cutáneos.

De igual forma, la investigación 'Relación entre el consumo moderado de cerveza, calidad nutricional de la dieta y tipo de hábitos alimentarios', concluye que las personas que ingieren cerveza de forma moderada presentaban mejores hábitos alimentarios y mayores niveles de HDL (colesterol bueno) y menores de LDL (colesterol malo) que los no consumidores.

Además, el estudio también afirma que los consumidores moderados que participaron presentaron una composición corporal más adecuada (se considera consumo moderado tres cañas diarias en el caso de los hombres y dos cañas diarias para las mujeres).

Estos resultados pueden deberse a la baja cantidad calórica de esta bebida fermentada (90 kcal en una caña de 200 ml), y un porcentaje aún más pequeño en el caso de la cerveza sin alcohol (una media de 34 kcal para la misma cantidad).

Por ello, Marcos considera que, "es necesario desterrar el falso mito de la barriga cervecera ya que esta bebida no es culpable de la obesidad".

Según el Estudio Nutricional de la Población Española , el 39,3% de la población adulta en Cantabria padece sobrepeso y el 17,6% tiene problemas de obesidad.