Los gastos asociados a la compra de una vivienda con financiación se han incrementado desde el mes de mayo de 2019, de forma que la cantidad de ahorros que hay que aportar para convertirse en propietario de una vivienda en Santander ha crecido un 14 por ciento en los últimos cuatro años, menos que en España (21%), según idealista.
En este sentido, los gastos asociados a la compra de una vivienda con financiación (excluidos aquellos de los que se hace cargo la entidad financiera) se han incrementado con fuerza desde el mes de mayo de 2019, según este estudio.
El incremento en el precio de la vivienda y la negativa de los bancos a financiar más del 80 por ciento del valor de tasación, junto con otros gastos asociados como los impuestos y otros gastos inherentes a la operación, han provocado que la cantidad de ahorros que hay que aportar para convertirse en propietario de una vivienda haya crecido un 21 por ciento en los últimos cuatro años en España.
El importe medio de una entrada para una vivienda de 2 dormitorios en el país era de 34.906 euros en mayo de 2019, mientras que en mayo de 2023 se sitúa en 42.293 euros. En el caso de Santander se ha pasado de 37.628 euros a los 42.750 actuales.
Tanto la entrada como el importe a financiar han crecido, a lo que se suma el ascenso del coste de financiación. Con una hipoteca a 30 años a la tasa media registrada en mayo de 2019 (2,15 por ciento), las cuotas del primer año se situaban en 352 euros para una vivienda de dos dormitorios en España --363 euros en Santander-- mientras que en mayo de 2023 (con un tipo de interés de abril según el Banco de España del 3,61 por ciento) el importe llega hasta los 513 euros, un 46 por ciento más. En el caso de la capital cántabra, la cuota está en 496 euros, un 37% más cara.
