La sala Naos del Museo Marítimo del Cantábrico (MMC) acoge este jueves, 13 de julio, la inauguración de la exposición de José Luis Ochoa y Rafael Muro 'Mar Abierto', una obra que "mira al mar desde el lugar común de la pintura".
Aunque con una mayor presencia de obra pictórica, en esta exposición, que se inaugurará a las 18.00 horas, también hay fotografía, audiovisual e instalación, para extenderse en una descripción multidisciplinar de "algo tan inconmensurable" como el mar, indica la comisaria de la muestra, Alexandra García, en un comunicado.
En esta obra, el espectador divisa la línea del horizonte de ese "mar abierto" que separa el cielo del mar.
En la parte superior de la línea del horizonte se puede observar la obra de José Luis Ochoa, que describe esa superficie del mar, lo que ocurre sobre ella, "ese aura que envuelve y genera contexto, que nos habla del pasado, presente y futuro".
En su obra, el material adquiere importancia como vehículo para las ideas y activador de las experiencias; la materia es la protagonista de unas investigaciones donde figuran algunas de las contradicciones más ineludibles del hombre, como lo absurdo y lo sublime, la presencia y la ausencia, la luz y la oscuridad.
Debajo de la línea del horizonte está la obra de Rafael Muro, "siempre enigmática, rodeada de un azul oscuro, casi negro, que parece sumergirnos en las profundidades del océano".
Con formas abstractas, de apariencia celular, primitivas y complejas a la vez, flotan luminosas sobre la oscuridad del azul, y Muro construye su propio lenguaje con una especie de "microcosmos en el que los signos son tantos como formas puede imaginar".
Ambos artistas mantienen en sus trabajos, así como en sus procesos, un aura romántica donde la naturaleza, lo sublime y una sensibilidad emocional se conectan a través de la oscuridad presente en ambas obras y en el propio espacio expositivo.
