El Centro Botín inaugurará este sábado, 25 de junio, coincidiendo con su quinto aniversario, la primera restrospectiva de la obra dibujística del escultor español Juan Muñoz, que incluye más de 200 piezas realizadas en los años 80 y 90 pero con un discurso que a día de hoy es "enormemente actual".
La exposición, 'Juan Muñoz: Dibujos 1982-2000', está comisariada por el autor y experto en arte moderno y contemporáneo Dieter Schwarz y cuenta con piezas prestadas para la ocasión por instituciones y coleccionistas particulares europeos y estadounidenses, así como por el Juan Muñoz Estate.
Reúne un número nunca antes visto de obras, sobre todo dibujos y también algunas esculturas, que reflejan que Juan Muñoz fue siempre "multidisciplinar", como ha dicho la hija del artista fallecido en 2001, Lucía Muñoz Iglesias, durante la rueda de prensa en la que se ha presentado este viernes la muestra en el Centro Botín, donde se podrá visitar hasta el 16 de octubre.
Acompañada por el comisario, la directora ejecutiva del Centro, Fátima Sánchez; y la directora de exposiciones, Bárbara Rodríguez; la hija del artista ha puesto en valor cómo desde el principio de su carrera "exploró con total honestidad, curiosidad, libertad y compromiso" la escultura y el dibujo, pero también la escritura, la obra sonora e incluso el teatro.
Y como enseñan las 204 obras que se podrán visitar desde mañana en el Centro Botín, fue capaz de "construir un discurso y trenzarlo" a través de diferentes medios y técnicas, pues sus dibujos se presentan sobre superficies como papel, algodón o tela de gabardina.
Además, "tuvo la valentía" de trabajar haciendo una reflexión sobre la condición humana, lo que hace que su obra sea "enormemente contemporánea y muy actual". "Desde el Estate estamos muy felices de que esta muestra pueda recordar e incluso descubrir a un público más joven que Juan Muñoz siempre fue un artista multidisciplinar", ha dicho Lucía Muñoz.
En la misma línea, el comisario ha señalado que la exposición releja los registros explorados por Muñoz a lo largo de dos décadas y "permite al espectador experimentar de una manera diferente la increíble obra de uno de los artistas europeos más relevantes del siglo XX".
Los dibujos, enigmáticos y personales, relatan historias "nunca antes contadas" y lo hacen mediante un formato figurativo, lo que en su tiempo supuso una rebelión contra la hegemonía del lenguaje abstracto. Por ello, Schwarz espera que los visitantes vivan una "profunda experiencia emocional que evocan estos misteriosos dibujos".
El comisario ha seleccionado piezas "clave" de la obra de Muñoz que muestran su variedad de materiales. Así, se ha incluido por ejemplo 'Late Portrait', una obra de 1985 en la que Muñoz dibujó con carboncillo sobre cemento; la instalación 'The Nature of Visual Illusion' (1994-1997), compuesta por tres figuras rodeadas de un gran acrílico sobre lienzo a modo de telón; o las series 'Raincoat Drawings' (1988-1995) y 'Back Drawings' (1990-1995), ejecutadas con tiza blanca y óleo blanco en barra sobre tela negra, a medio camino entre el dibujo, la pintura y la escultura.
RECORRIDO EXPOSITIVO
La exposición se estructura en 12 secciones, organizadas en su mayoría de manera cronológica y centrándose cada una en un tema específico de su obra. Por primera vez todas se reúnen en un único contexto, agrupándose trabajos de periodos concretos de su trayectoria. Cierra el recorrido una sección que incluye un conjunto de dibujos titulados 'Una breve descripción de mi muerte', con obras que creó solo dos años antes de su inesperado fallecimiento.
La directora del Centro Botín y la responsable de exposiciones han puesto en valor la labor de los profesionales que han logrado que el espacio haya cambiado "tantísimo" con la creación de 12 salas para esta distribución en "mini exposiciones".
También han destacado lo "emocionante" de celebrar el quinto aniversario del Centro, que abrió sus puertas al público el 24 de junio de 2017, y hacerlo con esta muestra que ofrece una "perspectiva completa" de la obra de Juan Muñoz gracias a 45 presstamistas.
Y es que Muñoz, nacido en Madrid en 1953, creó una copiosa producción, con obras que podían formar parte de piezas escultóricas o concebirse como escenas narrativas, pero también adoptar la forma de creaciones autónomas que permitían al artista idear imágenes de gran carga metafórica.
Su trayectoria estuvo marcada por el deseo de plasmar sus ideas de manera multidisciplinar: de la escultura al dibujo -creando dibujos autónomos y dotados de una gran cualidad escultórica-, de la escritura a las piezas de sonido o teatrales.
La exposición va acompañada de un catálogo en español e inglés, coeditado con La Fábrica, con reproducciones de las obras presentadas y textos sobre Juan Muñoz y el dibujo como medio artístico, encargados a diversos autores expresamente para la ocasión, entre los que figura un ensayo del comisario ofreciendo una visión general de la obra en dibujo de Muñoz, un texto de James Cahill sobre las ilustraciones del artista para Joseph Conrad y otro de Manuela Mena Marqués centrado en la relación de Muñoz con el dibujo español de los siglos XVIII y XIX.
También se incluyen reseñas de John Berger, James Lingwood, Declan McGonagle, Brenda McParland y Guy Tosatto, director del Musée de Grenoble.
