Siguen las labores para retirar el argayo de la A-8 y abrir un carril hacia Santander

Por ahora se mantiene el desvío por la N-634 pero se trabaja para abrir un carril de la calzada contraria que permita ir en dirección Santander

La Demarcación de Carreteras del Estado en Cantabria sigue trabajando a estas horas para retirar el desprendimiento que desde esta madrugada mantiene cortada la A-8, en el límite con Vizcaya, en dirección Santander, haciendo por ahora necesario el desvío por la N-634, que se quiere eliminar abriendo uno de los carriles del sentido contrario.

Lo que se quiere hacer es abrir la mediana para que los vehículos que circulen dirección Santander utilicen uno de los tres carriles de la calzada contraria, lo que permitiría eliminar el desvío por la N-634, que es de aproximadamente un kilómetro, han informado a Europa Press fuentes de la Delegación del Gobierno en Cantabria.

Estas mismas fuentes han explicado que el trabajo para retirar el desprendimiento y reforzar el talud afectado es "complejo" porque éste, aparte de lo que se ha caído, está "bastante mal" por las filtraciones de agua.

Por ello, no solo habrá que retirar el desprendimiento, sino también hacer otro tipo de actuaciones.

El desprendimiento, ocurrido a la altura de Ontón (Castro Urdiales) se produjo sobre las 4.25 horas de este sábado, a causa de las lluvias y desde entonces los dos carriles en dirección a Santander permanecen cortados, estableciéndose un desvío por la N-634.

Concretamente, el argayo se ha producido en el kilómetro 139,225, a la altura de Ontón (Castro Urdiales). El desvío comienza en el km 138 de la A-8, en Muskiz (Vizcaya), donde los coches deben incorporarse a la N-634, volviendo a la autovía en el 139,900.