Comillas continuará la poda de los castaños del Corro Campíos pese a las quejas

El equipo de Gobierno de Comillas (PRC-PSOE) se ha reunido con vecinos del municipio que han recogido firmas para paralizar la tala y poda de los castaños ubicados en el Corro Campíos y les ha trasladado que va a continuar con los trabajos ya que se hace por la seguridad de las personas que transitan por esa zona.

En concreto, desde el Ayuntamiento han trasladado que se continuará con la poda en verde, aconsejada para esta época del año, y con la poda de seguridad, que es la que elimina ramas enfermas y muertas para "reducir al máximo posible" la posibilidad de que ocurra un accidente.

Además, se vallará la zona y se procederá a la plantación de arbolado en los alcorques vacíos de la plaza del corro por unos magnolios de un porte medio, según ha informado el Consistorio en nota de prensa después de que los vecinos hayan recogido firmas y de que la oposición tratara de impedir la semana pasada las labores de poda, para lo que cuatro de los cinco concejales del PP se sentaron en los bancos que hay bajo estos árboles.

La alcaldesa, María Teresa Noceda (PRC), ha explicado a los vecinos en el encuentro su "preocupación por la seguridad de las personas" y les ha comunicado que se solicitará una nueva consulta técnica para los ejemplares más deteriorados con el objetivo de atender sus demandas y con el objetivo de "mantener un clima de diálogo y mesura en el pueblo".

En este sentido, se les ha informado de las tres opciones del informe con el que cuenta el Ayuntamiento, en el que se ponen de manifiesto las razones de la opción elegida.

La primera opción que detalla el informe es llevar a cabo podas de seguridad, así como el apuntalamiento con elementos auxiliares, lo que "minimiza el riesgo pero no se actúa sobre el problema".

Por ello, desde el equipo de Gobierno han explicado que se eligió la segunda opción, que contempla podas progresivas y de seguridad, la aplicación de fungicidas y la instalación de elementos de seguridad, así como sustitución de los dos ejemplares más deteriorados y que representan un "gran riesgo". En concreto, se trata de dos castaños de gran porte, de ocho metros y con 15 años.

Finalmente, la tercera opción proponía el apeo y sustitución de cuatro de los ejemplares y fue descartada desde un inicio, porque "se buscaba garantizar la seguridad de los usuarios de este espacio a la par que proteger y conservar el mayor número de ejemplares", han argumentado.

Además de la alcaldesa, en la reunión han estado presentes el concejal de Medio Ambiente, Julián Rozas, el técnico especialista de Arbocan y representantes de la plataforma vecinal.