Ganadería detecta 37 casos nuevos, con un total de 610 vacas enfermas

Cantabria cuenta en estos momentos con un total de 610 casos de enfermedad hemorrágica epizoótica, después de que en la jornada de hoy se hayan registrado 37 nuevos casos, tal y como ha informado la consejería Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación a través de un comunicado.

El brote, que afecta en su totalidad a ganado vacuno de carne, se manifiesta en 36 municipios ubicados en las comarcas de Solares, Torrelavega, San Vicente de Toranzo, Gama/Santoña, Villacarriedo, Ramales de la Victoria y Santander.

El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, Pablo Palencia, ha destacado que las medidas restrictivas que se están aplicando en Cantabria están "permitiendo que la enfermedad esté controlada y no se expanda de manera progresiva por la región".

Asimismo, ha puesto en valor los esfuerzos que están realizando los técnicos veterinarios de la Consejería como primera línea de defensa y de atención a los ganaderos a la hora de evitar la propagación de la enfermedad mediante el control de movimientos de zonas restringidas a libres, la desinsectación de animales y transportes previos a los movimientos y la exigencia de un certificado de veterinario o una declaración responsable del ganadero según el destino.

Así, se mantiene activadas las medidas restrictivas que impone el Plan Nacional Zoosanitario, de tal manera que se limita el movimiento de los animales en toda Cantabria, y se implementarán medidas de desinfección del transporte de animales. En el caso de la comarca de Solares y alrededores se pide a los ganaderos que aíslen y no hagan movimientos de los animales para evitar expandir el foco.

Además, es obligatorio que los ganaderos cuenten con el certificado veterinario de desinfección de animales y de sus medios de transporte en vigor, así como el certificado veterinario de animales con síntomas.

Avisan de que, ante esta situación, es preciso que los ganaderos extremen los cuidados y ponga en marcha medidas de prevención contra vectores en ganaderías y medios de transporte, y evitar el desplazamiento de animales o importar de zonas donde ya hay casos confirmados.

Desde la consejería recomiendan a ganaderos y ayuntamientos que, en la medida de lo posible y para contribuir a evitar la propagación de la enfermedad, no celebren ferias ni concentraciones ganaderos y que quienes detecten en sus animales síntomas compatibles con esta enfermedad, se pongan en contacto con los veterinarios. 

Por otro lado, la consejería sigue con la programación de cursos de bioseguridad agraria para los ganaderos de las comarcas afectadas y alrededores con el fin de frenar la propagación de esta enfermedad y aislar el foco. En concreto, los técnicos veterinarios iniciaron la semana pasada charlas informativas y cursos de formación para los titulares de las explotaciones ganaderas con el fin de implementar medidas higiénico-sanitarias durante las próximas semanas.