El director general para África del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Raimundo Robredo, ha asegurado que "es más fácil fortalecer los recursos" de los países africanos que "tratar de poner barreras" en el Mediterráneo. "Tenemos los recursos, lo que hay que hacer es movilizarlos", ha aseverado.
Así lo ha expresado durante su intervención este jueves en el curso 'Quo Vadis Europa? VII. Europa ante el nuevo ciclo político' que tiene lugar esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, en la que ha explicado que la actual política exterior española en el continente "trata de crear condiciones para las empresas", así como "coordinar la seguridad" y "generar empleo".
Según ha revelado, África "va a doblar su población" lo que supone un "desafío titánico" al que, en su opinión, no se puede hacer frente con las estrategias de cooperación y desarrollo que ha venido desarrollando España en los últimos años sino que en su lugar cree que "hay que movilizar a las empresas".
"España comercia más con África que con América Latina desde hace años pero invertimos muy poco y sólo en Marruecos y Sudáfrica", ha criticado.
Por ello, ha hecho un llamamiento a "dejar atrás los estereotipos" como la existencia de conflictos en la región que, tal y como asegura "cada vez son menores" debido a que, las organizaciones regionales "cada vez son más capaces de forzar elecciones y transiciones", así como abandonar "prejuicios" en materia de inmigración.
"La percepción es que los africanos emigran a Europa pero la realidad es que no lo hacen: la primera migración masiva africana es del campo a las ciudades que crecen de forma explosiva", ha resaltado.
Tal y como ha añadido, el crecimiento de las ciudades "provoca una aumento de la productividad de la mano de obra", "facilita la educación" y "retrasa la edad a la que las mujeres comienzan a tener hijos".
A este respecto, también ha resaltado la creación de una "política feminista" entre España y África que aboga por el "empoderamiento" como "una cuestión de justicia" así como "la respuesta más eficaz" ante el desafío demográfico del continente.
Además, Robredo ha apuntado a que "la segunda gran migración" se da entre países africanos y ha matizado que el 80% de migrantes africanos entre países del continente. Así, ha apostillado que el pasado año, Sudáfrica recibió "el doble de migrantes" que el conjunto de Europa.
No obstante, ha alertado de que en estos países también existe una suerte de nacionalismo que busca "frenar a los extranjeros". "Si eso triunfa esos inmigrantes van a acabar en las costas españolas", ha añadido.
Por ello, ha abogado por impulsar el desarrollo de estas regiones y ha señalado que el objetivo de España es "jugar el papel" que en su momento tuvo en el desarrollo de América Latina. De lo contrario, tal y como alerta, el crecimiento de estos países puede "poner en peligro los equilibrios y la manera en la que Europa se ve a sí mismo", así como "crear un caldo de cultivo" para tendencias como el radicalismo y el yihadismo.
Así lo ha expresado durante su intervención este jueves en el curso 'Quo Vadis Europa? VII. Europa ante el nuevo ciclo político' que tiene lugar esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, en la que ha explicado que la actual política exterior española en el continente "trata de crear condiciones para las empresas", así como "coordinar la seguridad" y "generar empleo".
Según ha revelado, África "va a doblar su población" lo que supone un "desafío titánico" al que, en su opinión, no se puede hacer frente con las estrategias de cooperación y desarrollo que ha venido desarrollando España en los últimos años sino que en su lugar cree que "hay que movilizar a las empresas".
"España comercia más con África que con América Latina desde hace años pero invertimos muy poco y sólo en Marruecos y Sudáfrica", ha criticado.
Por ello, ha hecho un llamamiento a "dejar atrás los estereotipos" como la existencia de conflictos en la región que, tal y como asegura "cada vez son menores" debido a que, las organizaciones regionales "cada vez son más capaces de forzar elecciones y transiciones", así como abandonar "prejuicios" en materia de inmigración.
"La percepción es que los africanos emigran a Europa pero la realidad es que no lo hacen: la primera migración masiva africana es del campo a las ciudades que crecen de forma explosiva", ha resaltado.
Tal y como ha añadido, el crecimiento de las ciudades "provoca una aumento de la productividad de la mano de obra", "facilita la educación" y "retrasa la edad a la que las mujeres comienzan a tener hijos".
A este respecto, también ha resaltado la creación de una "política feminista" entre España y África que aboga por el "empoderamiento" como "una cuestión de justicia" así como "la respuesta más eficaz" ante el desafío demográfico del continente.
Además, Robredo ha apuntado a que "la segunda gran migración" se da entre países africanos y ha matizado que el 80% de migrantes africanos entre países del continente. Así, ha apostillado que el pasado año, Sudáfrica recibió "el doble de migrantes" que el conjunto de Europa.
No obstante, ha alertado de que en estos países también existe una suerte de nacionalismo que busca "frenar a los extranjeros". "Si eso triunfa esos inmigrantes van a acabar en las costas españolas", ha añadido.
Por ello, ha abogado por impulsar el desarrollo de estas regiones y ha señalado que el objetivo de España es "jugar el papel" que en su momento tuvo en el desarrollo de América Latina. De lo contrario, tal y como alerta, el crecimiento de estos países puede "poner en peligro los equilibrios y la manera en la que Europa se ve a sí mismo", así como "crear un caldo de cultivo" para tendencias como el radicalismo y el yihadismo.
