El sindicato UGT Cantabria analizará las debilidades y fortalezas de esta comunidad para una transición "justa" frente al cambio climático y estudiará cómo este fenómeno afectará a la región, a su actividad económica y al mercado laboral, teniendo en cuenta el "desequilibrio" que existe entre los distintos sectores que hace que sea "más vulnerable" a crisis como la ocasionada por la pandemia del coronavirus.
El informe se denomina proyecto 'Trajuca' (Transición Justa para Cantabria) y se apoyará en el Mapa de Vulnerabilidad del Empleo elaborado por la organización a nivel nacional.
El objetivo es que esté concluido a finales de este año, como han indicado este lunes el secretario general autonómico de UGT, Mariano Carmona, y la responsable regional de Medio Ambiente del sindicato, Mónica Calonge, que ha considerado que "ya vamos tarde".
En rueda de prensa, han explicado que el informe se hará por comarcas y se centrará en varios sectores: agroalimentario, automoción y componentes auxiliares, turismo, construcción y el energético, que son los considerados como "referentes sólidos" por el grupo de técnicos expertos en finanzas sostenibles de la Unión Europea.
En este sentido, los sindicalistas han señalado que la región cuenta con cuatro grupos de actividades: la industria -dividida a su vez en la química, de alimentación y de automoción y componentes del automóvil, siendo "muy dependiente" de estas últimas-; el turismo, que está "debilitado" por el Covid; la construcción, sector que venía "tocado" por la anterior crisis económica; y el de los servicios, que se ve influenciado y afectado por los demás.
El secretario de UGT ha señalado que el objetivo es que haya un "equilibrio" entre todos, y no que Cantabria sea -por ejemplo- una comunidad autónoma "sobreexpuesta" a la construcción o al turismo pero "carente" de energía.
En este punto, ha aprovechado para reiterar la denuncia de su formación sobre el "abandono" de la industria tradicional que ha llevado a la situación actual al sector servicios, que está "sobredimensionado" y es "poco sostenible".
ESTUDIO, EN DOS PARTES Y POR COMARCAS
En cuanto al estudio en sí, se realizará en dos partes, una primera cuantitativa y una segunda fase más cualitativa que incluirá entrevistas, y se hará en colaboración con la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente y el resto de departamentos del Ejecutivo, así como con todos los sectores y agentes sociales implicados.
Las conclusiones se trasladarán a la administración para su posterior debate en mesas sectoriales y la idea es que puedan estar antes de que finalice este 2021, porque "ya vamos tarde", ha expresado la portavoz de Medio Ambiente de UGT, que ha recordado así que el cambio climático no es un asunto de "futuro", sino de "presente".
"En Cantabria, ya vamos tarde en este reto del cambio climático y la transición justa con el horizonte puesto en el año 2050, cuando tendremos que tener cero emisiones contaminantes", ha defendido Calonge, para comparar España cuenta ya con una legislación específica:
"Considerábamos obligado empezar a trabajar aquí cuanto antes y con un estudio con el suficiente rigor técnico y científico como para que Cantabria pueda acceder a los fondos europeos previstos para lograr la transición justa", ha defendido.
"Vemos que en Cantabria no se está haciendo nada; no hay detrás un estudio, un trasfondo sobre la transición justa y el empleo que puede generar", ha lamentado la sindicalista.
Y ha agregado, además, que esta región está en "desventaja" respecto a comunidades vecinas, especialmente Asturias y Castilla y León, de cara a los convenios de transición justa y los fondos europeos para ayudar al tránsito hacia una economía sostenible que tiene como uno de los objetivos inmediatos el abandono del carbón, este mismo año.
Así, la finalidad de 'Trajuca' es, por un lado, "tener claro" el modelo de desarrollo de la región y, por otro, atraer actividades de determinados sectores que contribuyan a la generación de empleo y de calidad.
En este punto, y para finalizar, Mónica Calonge ha recordado que en el sindicato llevan casi dos décadas "bastante preocupados" además de por el impacto del cambio climático en la región, por la evolución del mercado laboral, que cuenta en la actualidad con tres frentes abiertos.
Son la pandemia, que ha venido a "tambalear" el sistema vigente y ha puesto "en duda" la globalización; la digitalización, que se ha incrementado con el Covid y ha hecho que plataformas digitales "ganen terreno" al comercio tradicional; y el propio cambio climático, que es "una realidad", así como el compromiso de la UE de ir a emisiones cero de carbón para el año 2050.
