La Universidad de Cantabria (UC) y la Asociación de Padres de Afectados del Síndrome del Espectro Autista y otros Trastorno Generalizados del Desarrollo de Cantabria (APTACAN) han firmado un convenio marco con el objetivo de colaborar en los campos formativos, científicos y técnicos de interés común, incluyendo la participación en proyectos conjuntos tanto de ámbito nacional como internacional.
El acto de formalización del acuerdo se ha celebrado este miércoles en el Pabellón de Gobierno de la UC con la presencia del rector, Ángel Pazos, y la presidenta de APTACAN, María Jesús Molino Tazón.
Al acto han asistido además, por la Universidad, la vicerrectora de Estudiantes y Empleo, Marta García Lastra, y el vicerrector de Transferencia del Conocimiento y Emprendimiento, Daniel Pérez; y por APTACAN, el responsable de Empleo y Vida Adulta, Nino Elgarrista.
El convenio establece un marco de actuación entre la institución académica y la asociación, con una duración inicial de cuatro años que podrá prorrogarse por otro periodo igual.
Se formaliza así una colaboración que ya venía canalizándose a través del Sistema de Orientación de la UC (SOUCAN) para el acompañamiento y apoyo directo a estudiantes con Trastorno del Espectro Autista (TEA) dentro del entorno universitario, a las que se sumarán actividades de formación, asesoramiento mutuo, colaboración en el uso de instalaciones y sensibilización y difusión en torno a la inclusión de personas con discapacidad y/o TEA.
Creada en 2003, APTACAN tiene entre sus fines atender las necesidades de las personas con TEA y sus familias, para lograr su reconocimiento a nivel social, educativo y familiar, promoviendo su desarrollo integral como personas. Para ello cuenta con un equipo multidisciplinar que incluye a profesionales de la psicología, logopedia, educación, integración social, psicomotricidad, etcétera.
Actualmente APTACAN atiende a cerca de 150 familias repartidas por toda la comunidad. Una cifra que se ha duplicado en los últimos tres años ya que los casos de autismo cada vez son más comunes, llegando a una incidencia actual de 1 caso por cada 100 nacimientos, y habiendo más de 450.000 personas con TEA en España, según los datos del estudio europeo Autism aisbl 2015.
