El SCS va a revisar los protocolos de sumisión química para adaptarlos a la agresión por pinchazos

El Servicio Cántabro de Salud (SCS) va a revisar los protocolos que ya tiene en marcha en materia de sumisión química y pinchazos accidentales para adaptarlos a la "agresión" por pinchazos, después de que varias personas hayan sido atendidas en los últimos días por supuestos casos de este tipo en el Reggaeton Beach Festival Santander.

Así lo ha anunciado el gerente del SCS, Rafael Sotoca, quien también ha explicado que se ha citado a las "nueve personas" que han sido atendidas por sospecha de pinchazo entre los días 31 de julio y 1 de agosto en el Servicio de Atención de Enfermedades Infecciosas del Hospital Valdecilla, con el objetivo de "completar el estudio" para descartar infecciones y tóxicos y hacer seguimiento de los casos.

En declaraciones remitidas a la prensa, Sotoca ha afirmado que los centros del SCS "están preparados" apara tender a toda aquella persona que tenga sospecha de haber sido agredida por un pinchazo. "Nuestro personal, los profesionales, saben como actuar y manejar en estos casos", ha dicho.

Por ello, ha instado, a quien crea haber sido objeto de un pinchazo, a ponerse en contacto con el 112, para ser derivado a un centro sanitario, o bien a acudir directamente a uno de ellos para ser atendido.

De esta manera, los profesionales del SCS "aplicarán los protocolos y realizarán las pruebas para descartar intoxicaciones por sustancias toxicas o para descartar también infecciones provocadas por el pinchazo", ha explicado.

El Reggaeton Beach Festival Santander (RBF Santander) se celebró el domingo y, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Cantabria y de la Policía Nacional, once personas fueron atendidas por supuestos pinchazos de sumisión química en Valdecilla y cuatro han denunciado el caso ante la Policía Nacional, que está investigando los hechos.

En todos los casos, el análisis toxicológico ha resultado negativo. Además, en ninguno de los casos se han producido delitos asociados al supuesto pinchazo, ni de hurtos ni de agresiones sexuales o cualquier otro, han indicado las mismas fuentes a Europa Press.