El PP en el Parlamento de Cantabria ha anunciado que registrará una proposición no de ley en la Cámara para pedir al Gobierno regional (PRC-PSOE) que la elaboración y el reparto de comida a domicilio sen considerados como "servicio esencial" para que puedan trabajar más allá de la hora del toque de queda decretado en la comunidad, que en la actualidad es a las 22.00 horas.
Así lo ha avanzado, en un comunicado, el portavoz del grupo parlamentario popular, Íñigo Fernández, tras reunirse este martes en el Parlamento con los representantes del colectivo de establecimientos y repartidores de comida a domicilio y productos de primera necesidad de Cantabria, Javier Grifé y Juan Manuel Sainz.
Fernández ha explicado que esta proposición no de ley en apoyo a "otro sector más castigado por el Gobierno de Cantabria" supondrá que no les afecte el toque de queda que contemplan las restricciones a la movilidad y medidas sanitarias vigentes, según las cuales el límite horario para la comida a domicilio son las 22.00 horas, imposibilitando la realización de los últimos pedidos, así como la movilidad de los profesionales.
El portavoz del PP ha recordado que en el estado de alarma de primavera, el sector de la comida a domicilio ofreció un servicio muy importante a la ciudadanía, dada la situación creada por el coronavirus y las restricciones derivadas de la misma.
"Pediremos que puedan trabajar más allá de las 22:00 horas", ha señalado Fernández, para quien la actitud del Gobierno de Cantabria con la hostelería regional resulta difícil de entender, "roza el ensañamiento". "Todos son problemas, todos son pegas, todos son dificultades y no se da cuenta de que el sector hostelero es muy importante para la región y el empleo de los cántabros", ha indicado.
El portavoz popular ha pedido al Ejecutivo regional "que cambie de actitud y se convierta en un aliado en lugar de ser un enemigo de los hosteleros, que es lo que parece últimamente".
"Yo creo que el Gobierno de Cantabria tiene que entender que en esta situación tan crítica y delicada, de lo que se trata es de intentar ayudar a la gente y dejarles sobrevivir, y no de estrangular todas las actividades económicas, porque si sigue en esta línea con el tiempo se va a acabar arrepintiendo porque muchos no va n a poder sobrevivir", ha sentenciado.
A juicio de Fernández, "da la sensación de que, ante la imposibilidad de hacer frente a la situación de la pandemia, se buscan chivos expiatorios, cabezas de turco y de verdad que con la hostelería este Gobierno se está cebando".
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