El consejero de Salud, César Pascual, ve "absolutamente lamentable" y "de una gravedad extrema" los hechos cometidos por las cuatro trabajadoras del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Sierrallana condenadas a prisión por un Juzgado de Santander por coacciones a compañeros desde 2011.
Pascual ha valorado este viernes el fallo a preguntas de la prensa y ha señalado que hasta que la Justicia no dicte sentencia firme la Administración no puede tomar una decisión al respecto al encontrarse en procedimiento judicial, lo que conlleva la paralización del resto de expedientes.
En este sentido, ha avanzado que si las acusadas no recurren la sentencia se iniciará un expediente administrativo, cuyo resultado probablemente conduzca incluso a la pérdida de su condición de sanitarias por la "gravedad" de los hechos.
Y aunque la sentencia destaca que el conflicto llegó al conocimiento de gerentes, jefes del servicio, directores médicos y servicio de prevención pero no se adoptó "ninguna medida efectiva", el titular de Salud ha asegurado que él no tenía conocimiento de los hechos hasta que hace unos meses le informaron de que este asunto estaba en el Juzgado.
Asimismo, Pascual, que ha hecho estas declaraciones en la presentación del programa de cribado de cáncer de colon, ha indicado que ha conocido ahora la sentencia, que ya esperaba que iba a ser condenatoria porque los hechos son "de una gravedad extrema".
