El Servicio de Microbiología del Hospital Valdecilla registró un incremento en el número de pruebas diagnósticas de casi el 175 por ciento en los dos años de pandemia, en los que ha tenido que asumir "enormes cambios", según el jefe de sección del servicio, Jorge Calvo.
En una entrevista al Colegio de Médicos de Cantabria recogida por Europa Press, Calvo ha destacado el "impacto brutal" en la organización de este Servicio que ha supuesto el Covid-19, tanto en la adecuación de espacios físicos, como en la necesidad de nuevos recursos humanos, y el continuo aprendizaje y evaluación de nuevas técnicas de diagnóstico.
"Un aspecto fundamental fue la creación y organización a contrarreloj de un laboratorio de diagnóstico exclusivo para la detección de SARS-CoV-2, moldeándose a las circunstancias concretas de cada momento, sin que se vea afectado el resto de las actividades asistenciales de nuestro servicio", ha explicado.
Según Calvo, el "incremento explosivo" de la actividad del servicio se refleja en que mientras en 2019 el número de pruebas diagnósticas eran poco más de 400.000 anuales, el año pasado supusieron más de 1.100.000, casi un 175 por ciento más en sólo dos años. "Pero más allá de esos números, la carga de trabajo ha sido muy superior debido a la especial complejidad de las pruebas de diagnóstico molecular, como las pruebas de PCR", ha precisado.
Todo ello se ha traducido en "un considerable impacto emocional y físico" en muchos de estos profesionales en diferentes momentos de la pandemia, de los que Calvo destaca su "enorme" dedicación y capacidad de adaptación, "que se evidencia en que ha estado trabajando al menos una docena de referencias diferentes de PCR de SARS-CoV-2 y otras tantas de técnicas para extracción de ácidos nucleicos".
Respecto a los cambios en la pandemia durante este tiempo, ha explicado que la aparición de la actual variante Omicron "está configurando un nuevo grupo de cepas bastante divergente de las anteriores variantes, y aunque no se debe descartar nuevas variantes, parece que se mantendrá su predominio en los próximos meses".
A su juicio, es importante mantener la estructura actual de vigilancia de nuevas variantes de SARS-CoV-2, que puede ser extensible a otros virus respiratorios como la gripe. En este sentido, ha señalado que Microbilogía implantó nuevas técnicas de secuenciación del genoma completo del virus, así como técnicas rápidas de detección de variantes descritas como de alto riesgo.
"El riesgo de selección y diseminación de nuevas variantes se mantendrá si no se avanza en la vacunación de las poblaciones de países menos desarrollados, y también es importante la vigilancia del virus en pacientes inmunodeprimidos", porque en ellos la multiplicación del virus es "más prolongada" y por tanto "son mayores las oportunidades de aparición de mayor numero de mutaciones" que podrían emerger como nuevas variantes de SARS-CoV-2 "con características de virulencia incrementada o mayor escape a la inmunidad".
Sobre el final de la pandemia, Calvo considera que, aunque "nunca han durado indefinidamente", el virus "ha llegado para quedarse", aunque quiere "ser optimista" en el sentido que "no volverá a tensionar tanto a los sistemas de salud como hasta ahora, pero el tiempo lo dirá".
"Más allá de esto, sería dramático que no aprendamos de las lecciones que nos ha dejado el COVID, y se empiecen a desmontar las estructuras de vigilancia de nuevos microorganismos transmisibles por un criterio economicista mal entendido", ha dicho.
En cuanto a la situación de Valdecilla en esta especialidad, ha apuntado que "es muy difícil ser puntero en Microbiología por el enorme prestigio que la Microbiología española tiene a nivel mundial", aunque tienen "la voluntad en ser punteros en nuevas herramientas diagnósticas de las que se puede beneficiar el conjunto de la asistencia sanitaria cántabra, y para ello disponemos de un equipo joven muy prometedor".
Actualmente la plantilla está formada por 14 facultativos adjuntos, incluido el responsable, cuatro residentes, 32 técnicos de laboratorio y cuatro auxiliares administrativos. Caso aparte es la dotación de técnicos del área COVID, que ha sido "muy variable durante la pandemia y con tendencia decreciente".
En cuanto a los objetivos a corto y medio plazo del Servicio, Calvo cita "retomar retos pendientes que se han aparcado", como la lucha frente a la resistencia a antimicrobianos y la sepsis, que no "causan muchas muertes y causarán muchas más en el futuro".
Otro objetivo "primordial" es la ampliación del laboratorio, que permitirá modernizar el Servicio de cara a una mayor automatización y mejorar la rapidez, eficiencia, eficacia y seguridad del procesamiento de las muestras, incorporando el uso de tecnologías innovadoras.
