Un primer grupo de 24 menores saharauis que pasarán el verano en la región en el marco del programa Vacaciones en Paz que gestiona Cantabria por el Sáhara ha llegado este viernes, tras aterrizar por la mañana en el aeropuerto de Vizcaya.
Sin embargo, estaba previsto que en ese vuelo vinieran otros 15 menores gestionados por Cantabria por el Sáhara y 20 más por Alouda Cantabria, pero la llegada de estos 35 se retrasa al poner Air Algerie un avión más pequeño de lo previsto.
Según Cantabria por el Sahara, la compañía desplazó al aeropuerto de Tinduf una aeronave "con menos capacidad de la contratada" para un chárter compartido por las asociaciones cántabras y del País Vasco, comunidad que también se ha visto afectadas por la falta de plazas.
Esta contingencia ha provocado la recolocación de ocho menores con destino al aeropuerto de Valladolid, desde donde se han trasladado por carretera hasta Cantabria, y de otros 27 que a priori volarán el sábado a Avilés, en Asturias.
A estos desplazamientos, Cantabria por el Sáhara ha de sumar el previsto este viernes, 18 de julio, al aeropuerto de Navarra, donde recibirá a otro grupo de diez menores para completar los 49 que serán acogidos bajo su gestión este verano.
Según el plan de vuelos inicialmente previsto, deberían haber llegado a la comunidad entre el 30 de junio y el 4 de julio pasados, pero "problemas burocráticos" en la expedición de los pasaportes provocaron la cancelación de los vuelos, circunstancia que afectó a varias comunidades autónomas.
VACACIONES EN PAZ
Vacaciones en Paz es una iniciativa solidaria gestionada en esta comunidad por Cantabria por el Sáhara, Alouda Cantabria y la Delegación saharaui, que busca ofrecer a niños y niñas un verano "lejos de las duras condiciones del desierto del Sáhara", así como también visibilizar la situación de "ocupación y exilio forzado que sufre el pueblo saharaui desde hace casi medio siglo".
Para afrontar la llegada, Cantabria por el Sáhara, que cuenta con el apoyo de las familias de acogida de los menores, moviliza a sus voluntarios a los cuatro aeropuertos donde aterrizan los menores.
Una vez en la región, fueron derivados al CIFP La Granja, en Heras, donde esperaban familias de acogida y representants del Gobierno regional y de los ayuntamientos de Medio y Marina de Cudeyo.
De los 49 menores gestionados por Cantabria por el Sáhara, 35 serán acogidos en familias y 14, con distintos grados de discapacidad, pasarán el verano en la residencia de este Centro Integrado de Formación Profesional, cedida por la Consejería de Educación.
Para garantizar una atención adecuada, Cantabria por el Sáhara ha firmado un convenio de colaboración con la ONG Moviendo Arena, especializada en la intervención con personas con discapacidad.
ZONAS INHÓSPITAS Y CONDICIONES EXTREMAS
Cantabria por el Sáhara destaca que estos menores llegan desde una de las zonas "más inhóspitas" del desierto del Sáhara, donde su pueblo "vive en condiciones extremas desde hace casi medio siglo".
Esta situación de refugio fue provocada, como indica, por los Acuerdos Tripartitos de Madrid de 1975, mediante los cuales España "abandonó ilegalmente su responsabilidad como potencia administradora del Sáhara Occidental".
Añade que la situación se agravó tras la ruptura del alto el fuego en noviembre de 2020, cuando Marruecos atacó a civiles saharauis en El Guerguerat, reanudando así el conflicto armado con el Frente Polisario.
Desde entonces, "la represión en los territorios ocupados ha aumentado, mientras se impide la entrada de observadores internacionales, prohibición que han experimentada recientemente en primera persona por un periodista cántabro, una asturiana y un activista de Cantabria por el Sáhara".