El Gobierno impulsará su colaboración con la UC con un 'Aula Permanente de Formación' con la Fundación Comillas

El Gobierno impulsará su colaboración con la Universidad de Cantabria (UC) para llevar a cabo, a través de la Fundación Comillas, actividades complementarias a los cursos de verano y que se denominará 'Aula Permanente de Formación'.

El consejero de Economía, Hacienda, Fondos Europeos y Financiación Autonómica, Luis Ángel Agüeros, lo ha anunciado este miércoles durante la inauguración del 'IV Encuentro: El camino hacia la Economía de Impacto' en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

Sobre esa nueva iniciativa de colaboración, ha detallado que "ya hemos tenido una primera experiencia con personas mayores de 40 años que quieren continuar formándose y ha sido de un éxito total, por lo que vamos a seguir estrechando lazos".

En su intervención, de la que ha informado el Gobierno, Agüeros también ha destacado el apoyo del Ejecutivo a la UC a través del contrato-programa firmado con la entidad, "de cifras históricas", y que ha definido como "el mayor contrato-programa de la historia, porque confiamos y creemos en ello".

Ha añadido que con esta apuesta "no se trata de aportar dinero", sino que se debe a que "creemos que la Universidad de Cantabria tiene departamentos punteros no solo en España, sino en Europa sobre ciertas materias".

En la inauguración del encuentro, el consejero ha estado acompañado de Francisco Matorras, vicerrector del campus de Las Llamas y coordinación de los CDI; Gema Igual, alcaldesa de Santander; Luis Muñoz, vicerrector de Relaciones y Estrategia Internacional de la UC; Luis Carlos Tortajada, director general territorial de MAPFRE y Ana Fernández-Labiada, del Centro Yunus Cantabria (YSBC Cantabria).

Agüeros ha animado a apostar por la Economía de Impacto "como una nueva forma de mirar el desarrollo económico" porque en la actual época "de enormes desafíos globales que vivimos, con crisis climáticas, desigualdades sociales y la urgente necesidad de una transición hacia economías más justas, no solo es necesario repensar cómo creamos valor económico, sino también cómo ese valor contribuye positivamente al bienestar de las personas y del planeta".

En este punto, el consejero se ha referido al papel de las empresas en este tipo de economía, en las que se reconocen "no únicamente como motores de beneficios financieros, sino también actores fundamentales en la generación de valor social y ambiental".