El fiscal mantiene las penas a los dos acusados por tráfico de drogas que negaron los hechos

El fiscal ha elevado a definitivas sus conclusiones acerca de los dos acusados por venta de cocaína en Santander, alrededores y Comillas que negaron los hechos durante el juicio, celebrado el martes y miércoles en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria y que ha quedado visto para sentencia.

Así, mantiene los nueve años de cárcel y 300.000 euros de multa solicitados para uno de los cuatro procesados, que supuestamente era el encargado de lavar el dinero, y al que imputa delitos de tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal y blanqueo de capitales.

Y sigue pidiendo siete años de prisión y 40.000 euros de multa al otro encausado que no admitió su participación, por tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal y tenencia ilícita de armas.

En cuanto a los otros dos, los que reconocieron los hechos en el arranque de la vista, el representante del ministerio público modificó su escrito y retiró la acusación por pertenencia a organización, rebajando a tres años de cárcel la pena pedida a cada uno por tráfico de drogas.

Según el fiscal, los procesados "tienen un mismo perfil: son personas que poseen un alto nivel de vida en sus viviendas, vehículos de lujo, etcétera, sin poseer ninguno actividad laboral para permitirse dicho nivel de vida".

En las entradas y registros en sus respectivos domicilios, se encontró droga así como dinero procedente del tráfico, joyas, armas e instrumentos para preparar las sustancias estupefacientes.

También se registró un pub de Comillas, propiedad de uno de ellos, donde se encontró cannabis y cocaína. Y en una de las viviendas se hallaron 159.710 euros, procedentes del grupo y que poseía uno de ellos "para proceder a su lavado a través de justificaciones que realizaba en la venta de vehículos".