Federación Cantabria Metal advierte que la huelga "va a ser la sentencia de muerte para muchas empresas"

Patronal y Sindicatos están llamados este miércoles a una nueva reunión de mediación en el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales (ORECLA), a las 12 horas.

El presidente de la Federación Cantabria Metal, Tomás Dasgoas, ha hecho un llamamiento a retomar la negociación en torno al convenio colectivo del sector y a "no levantase de la mesa hasta lograr un acuerdo que permita salvar la actividad de muchas fábricas y el empleo de muchísimos trabajadores", ya que ha advertido que la huelga "va a ser la sentencia de muerte de muchas empresas".

"Esta huelga, en la situación actual de las empresas, con tantísimos problemas, es un lujo que no nos podemos permitir", ha sentenciado en un comunicado remitido por CEOE-Cepyme Cantabria.

Dasgoas ha incidido en que la situación actual es "de extrema debilidad" debido a la "sucesión de problemas" como la pandemia, la escasez de materias primas, los costes "disparados", la inflación, el precio de la electricidad, la huelga del transporte y las consecuencias de la guerra de Ucrania.

La Federación Cantabria Metal es una asociación empresarial que no forma parte del proceso de negociación de este convenio, "pero somos una parte interesada porque también estamos sufriendo en primera persona los efectos de la huelga", ha señalado su presidente.

En este sentido, ha dicho que desde el colectivo quieren "hacer oír su voz" porque "hay muchas empresas dentro de la federación que no comprenden cómo se ha podido llegar a esta situación". "El convenio lleva más de año y medio vencido y en todo este tiempo ninguna de las dos partes ha sido capaz de llegar a un acuerdo. Lo que está ocurriendo no es de recibo", ha lamentado.

Para Dasgoas no hay otra solución que "negociar, negociar y acordar... pero sabiendo en la situación que se encuentran las empresas y la economía real. Pedir lo imposible, a sabiendas de que lo es, no es negociar. Negociar no es ser inmovilista", ha sentenciado.

"ESCALADA DE PRESIÓN" EN LOS PIQUETES

También ve "muy preocupante" la "escalada en la presión" de los piquetes informativos y ha denunciado que "informar no significa amedrentar, amenazar o boicotear".

"Según avanzan los días estamos asistiendo a una creciente ola de amenazas y actos contra el derecho a trabajan de quienes no están de acuerdo con la huelga. Varias fábricas y empresas están informando de acciones de intimidación que quieren amedrentar a los que quieren ejercer su derecho a trabajar. Algunas empresas en esta situación están optando por dar vacaciones a sus empleados o simplemente cierran".

Así, la huelga está afectando a la cartera de pedidos de las empresas que no pueden desarrollar su actividad, lo que deriva en la pérdida de clientes, y "algunos serán imposibles de recuperar".

En este sentido, ha explicado que a las fábricas de automoción, por ejemplo, "no les preocupa un conflicto regional", quieren poder seguir produciendo y "si en Cantabria no podemos cumplir con los compromisos buscaran a otros proveedores".

Al hilo, ha advertido que en este conflicto "también estamos jugando con la imagen de Cantabria". "Esta situación no ayuda nada. Cantabria debe ser una comunidad fiable para las inversiones. Somos un territorio privilegiado, pero esto no basta si el clima laboral no es estable y predecible", ha concluido, pidiendo al Gobierno regional que se implique "más a fondo" en la resolución de la huelga.