La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) Cantabria ha exigido al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, a las patronales y a los sindicatos mayoritarios, que "abandonen la pasividad" y alcancen de manera urgente un acuerdo que permita la jubilación anticipada sin penalización a los 52 años para las trabajadoras de residencias y de ayuda a domicilio, "pilares" del sistema de Atención a la Dependencia.
En un comunicado, CSIF Cantabria, ha explicado que con la publicación de la Orden PJC/1146/2025, de 13 de octubre, que regula la creación de una comisión para evaluar la aplicación de coeficientes reductores en la edad de jubilación, "ya no hay excusas para seguir bloqueando esta reivindicación histórica".
"Hablamos de una de las profesiones con mayor desgaste físico y emocional. Es inaceptable que se condene a estas profesionales -en su inmensa mayoría mujeres- a trabajar hasta los 67 años, cuando muchas sufren ya importantes secuelas físicas y psicológicas", ha denunciado el sindicato.
CSIF Cantabria ha subrayado que, tras años de servicio, prácticamente todas las trabajadoras del sector padecen dolencias musculoesqueléticas, ansiedad crónica u otros problemas de salud derivados de su labor y ha alertado sobre una situación "tan injusta como paradójica: personas mayores y enfermas obligadas a cuidar de otras en la misma o peor condición".
La central sindical considera que la publicación de esta orden "deja sin coartada a quienes, durante años, han bloqueado este avance social. El momento es ahora", por lo que ha exigido una respuesta inmediata.
"Cuidar a quienes nos cuidan no es un eslogan, es una obligación moral, social y política", ha subrayado CSIF, que ha reclamado "una dignificación real de la profesión, que incluya mejoras en las condiciones laborales, mayor estabilidad y salarios justos".
Finalmente ha advertido que no cesará en su lucha hasta lograr el reconocimiento que este colectivo "merece" y que debe traducirse en hechos: "una jubilación digna, justa y anticipada".