La conflictividad laboral se ha disparado en Cantabria en los dos primeros meses del año, según los últimos datos facilitados por el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE).
En concreto, en enero y febrero hubo 129 participantes en huelgas y el número de jornadas no trabajadas ascendió a 860, de modo que los primeros se multiplicaron por cuatro respecto al mismo periodo del año anterior (cuando eran 31) y las jornadas no trabajadas lo hicieron por 18 (47 en los dos primeros meses de 2024).
En enero de 2025 participaron en huelgas 65 personas y en febrero, 64. Las jornadas no trabajadas ascendieron a 780 en el primero mes del año y a 80 en el segundo.