El Juzgado de lo Social número 3 de Santander ha condenado a la empresa Saema Empleo, dedicada al reciclaje de residuos y pertenecientes al Grupo Amica, por eliminar o absorber complementos salariales para compensar la subida del Salario Mínimo Profesional, práctica que "no es ajustada a derecho".
El juez ordena a la sociedad a no eliminar y absorber los mismos a la hora de proceder a la aplicación del SMI tras los sucesivos incrementos decretados por el Gobierno de España, y que deberá actualizar a más de 70 trabajadores de los cien que componen la plantilla.
Así se desprende de una sentencia que estima la demanda interpuesta por el comité de empresa contra la dirección y las secciones sindicales de UGT y CCOO, y que según el sindicato demandante, USO, supone más de 200.000 euros en atrasos de salarios no cobrados.
Esta formación, que preside el órgano de representación de la plantilla, interpuso demanda contra la decisión "unilateral" de la dirección de empresa de retirar a más de 70 empleados los complementos de antigüedad, desarrollo y capacitación profesional y complemento personal, reconocidos en el convenio colectivo, para compensar la elevación del SMI que venían percibiendo, de 800 euros y que en la actualidad está en 1.000 euros.
En su resolución, el magistrado se hace eco de un reciente fallo del Tribunal Supremo que ratificaba otro del TSJ catalán, base de la defensa de la empresa, que reconoce la absorción en un conveniocolectivo de empresa de un centro especial de empleo.
Pero "no es el mismo convenio colectivo que el que se aplica en esta sentencia, cuyo articulado determina expresamente que los complementos no son absorbibles ni compensables".
"Se tiene la impresión", razona el juez para concluir estimando la demanda, "que deberá ser el Tribunal Supremo el que dilucide esta polémica en relación a cómo ha de complementarse o actualizarse el SMI", toda vez que "existen resoluciones contradictorias".
