Cantabria es la comunidad autónoma con mayor índice de incidencia de accidentes laborales de autónomos (145,9) en los cuatro primeros meses del año y tiene la segunda tasa más alta en accidentes mortales de este colectivo (0,621), solo por detrás de Galicia (0,716), según la Estadística de Accidentes de Trabajo que ha publicado el Ministerio de Trabajo y Economía Social y de la que se ha hecho eco la Asociación Trabajadores Autónomos (ATA".
En los cuatro primeros meses del año se han registrado un total de 10.852 accidentes de trabajo sufridos por los autónomos (235 de ellos en Cantabria), cifra que se mantiene en línea con la registrada en el mismo periodo del año anterior.
Así, de los 193.231 accidentes de trabajo registrados de enero a abril, 10.852 fueron de autónomos y 182.379 de trabajadores asalariados. En el caso de Cantabria, fueron 2.113 accidentes, de los que 1.878 fueron de asalariados.
De los 10.852 accidentes laborales sufridos por los autónomos un total de 29 resultaron mortales --uno de ellos en Cantabria--, cifra que es más de un 40% superior a la registrada en el mismo periodo de hace un año.
La gran mayoría de las muertes las sufrieron varones. Además, 28 de ellos fueron en jornada de trabajo, como en el caso cántabro, y sólo 1 fue in itinere, que son los accidentes que se producen al ir o al volver del lugar del trabajo.
Por comunidades autónomas, Galicia, Cataluña y Andalucía son las comunidades que mayor siniestralidad registraron en 2023, con 6, 5 y 4 accidentes laborales en jornada de trabajo que resultaron mortales, respectivamente.
El secretario general de ATA y responsable del área de prevención de riesgos laborales, José Luis Perea, ha calificado los datos como "dramáticos" y ha denunciado que los autónomos son "los grandes olvidados de la administración".
