Cantabria se sitúa entre las CCAA con menor proporción de población inmigrante, con un 9,7%

El número de residentes en España nacidos en el extranjero a 1 de enero de 2022 ascendía a 7.506.870 personas, el 15,8 por ciento de la población total, lo que supone prácticamente una de cada seis personas, que en el caso de Cantabria representa el 9,7 por ciento, situándose entre las comunidades autónomas con menos presencia de población inmigrante.

Además, a nivel nacional más de la mitad (un 56%) de los nacidos en el extranjero llegó al país hace 10 o más años, según ha dado a conocer FUNCAS con motivo del Día Internacional del Migrante, que se celebra este domingo 18 de diciembre.

Por todo ello, buena parte de la población inmigrante residente en España puede considerarse "consolidada". La proporción de migrantes se acerca a dos terceras partes en La Rioja (64%), Galicia (62%) y Murcia (62%) y alcanza valores más altos en Melilla (74%) y Ceuta (72%).

FUNCAS constata que, a pesar de las oscilaciones marcadas por el ciclo económico y la pandemia, desde 2000 España ha recibido constantes flujos migratorios. Incluso en el año de menor recepción de inmigrantes (2013), la cifra anual de nuevos residentes nacidos en el extranjero no bajó de los 300.000. En 2020, y a pesar de las restricciones a la movilidad internacional, establecieron una nueva residencia en España casi medio millón de personas nacidas en el extranjero, cifra que en 2021 superó las 600.000.

En cualquier caso, la presencia de la población inmigrante en España difiere mucho entre territorios. Las comunidades con una mayor proporción de nacidos en el extranjero son Islas Baleares (24,7%), Madrid (20,3%), Cataluña (20,3%) y Canarias (20,1%), frente a Extremadura (4,6%), Asturias (8,3%), Castilla y León (8,5%), Galicia (9,2%) y Cantabria (9,7%), todas ellas con porcentajes por debajo del 10%.

Según estimaciones de Naciones Unidas, la población migrante en el mundo ascendía a principios de esta década a 281 millones personas, algo menos del 4% de la población mundial, con diferencias muy importantes entre regiones.

De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en 2020 Oceanía era la región del mundo con un porcentaje más alto de migrantes sobre la población total (22%), seguida por Norteamérica (15,9%) y Europa (11,6%). Estados Unidos destacaba como el país del mundo con más inmigrantes (51 millones). El segundo y tercer puesto los ostentaban, a mucha distancia, Alemania, con 16 millones, y Arabia Saudí, con 13 millones. España ocupaba entonces la posición número 10 en el mundo en número absoluto de población migrante, con más de siete millones de personas.

En países que afrontan un proceso de "envejecimiento" de la población como consecuencia del aumento de la esperanza de vida y de la baja natalidad, la inmigración cobra una importancia crucial y se la considera uno de los factores clave para mantener la solidaridad intergeneracional sobre la que se asienta el Estado del bienestar.

"Un escenario demográfico como el de España exige planteamientos razonables y debates públicos sosegados sobre la inmigración. Es cada vez más urgente utilizar los conocimientos y las evidencias disponibles para diseñar una política de inmigración que concilie de la mejor forma posible las necesidades de la economía y del sistema de protección social con las preferencias de la población residente y con la integración de los inmigrantes", concluye FUNCAS.