Cantabria tiene identificados a 12 posibles incendiarios y creará grupos especiales de investigación

La Consejería reforzará la prevención con una nueva organización interna, quemas controladas y mejora de la información a la ciudadanía
11:00 horas. Sala de prensa del Gobierno de Cantabria
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, informa, en rueda de prensa, sobre medidas de prevención y lucha contra incendios forestales del Gobierno de Cantabria
12 nov 22
photo_camera 11:00 horas. Sala de prensa del Gobierno de Cantabria El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, informa, en rueda de prensa, sobre medidas de prevención y lucha contra incendios forestales del Gobierno de Cantabria 12 nov 22

Cantabria investiga en estos momentos a 12 personas por su posible implicación con los incendios forestales provocados en la comunidad y tiene previsto crear grupos especiales de investigación para reforzar el control, que estaría integrado por agentes del medio natural y técnicos ingenieros de la Consejería de Desarrollo Rural y Medio Ambiente.

Es una de las medidas que contempla este departamento dentro de la segunda fase del Plan Estratégico de Prevención y Lucha contra los Incendios Forestales (PEPLIF), que servirá para reforzar las medidas preventivas para la lucha contra los incendios.

Así, en esta segunda fase de desarrollo 2023-2027 el Plan incluye un total de 70 acciones en materia de organización, normativas, prevención, disuasión, gestión de montes, restauración de áreas quemadas y comunicación en información a la ciudadanía.

Entre las medidas a desarrollar, destaca la reforma de la estructura de la Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático de la Consejería para crear un servicio técnico específico de defensa del monte y que coordinará, entre otras, las actuaciones preventivas y el operativo de extinción, además de encargarse del seguimiento del desarrollo del PEPLIF.

Una reforma que atribuirá la categoría de bombero forestal a los agentes del Medio Natural, que ya se atribuyó el año pasado a las cuadrillas forestales, y derogará el actual reglamento del Operativo, que data de 2011, con la aprobación de uno nuevo que tenga en cuenta los nuevos medios disponibles y las lecciones aprendidas en estos 11 años.

También supondrá la incorporación plena de las cuadrillas de bomberos forestales y los agentes del Medio Natural en la realización de quemas prescritas, de forma que se complementen aquellas que las entidades locales soliciten para realizar con sus propios medios, lo que supondrá que las quemas, como herramienta preventiva, en particular en las zonas de ejecución más compleja, serán una tarea del Operativo que complemente las que ya realizan las cuadrillas con sus trabajos selvícolas, desbroces y mantenimiento de infraestructuras forestales.

Así lo ha avanzado el consejero de Medio Ambiente, Guillermo Blanco, durante una rueda de prensa que ha ofrecido este viernes junto al director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio, y el subdirector de Medio Natural, Ángel Serdio, para informar sobre la situación de los incendios forestales en Cantabria, así como las actuaciones puestas en marcha esta legislatura por la Consejería y las nuevas medidas de prevención y lucha contra incendios forestales a desarrollar en 2023.

MEDIDAS DESARROLLADAS

El consejero ha destacado el esfuerzo realizado por su departamento durante la presente legislatura para mejorar las dotaciones de medios humanos y materiales del Operativo, logrando "cubrir vacantes de puestos que llevaban años sin ocupar" de técnicos, agentes del Medio Natural y cuadrillas de bomberos forestales, así como renovar la flota de vehículos y mejorar los sistemas de comunicación telefónica.

"Nunca Cantabria había tenido tantos medios personales y materiales para la lucha contra incendios, pero nuestra apuesta por la mejora continua nos plantea el nuevo reto de una actualización integral de nuestros medios", ha señalado Blanco, quien ha destacado el incremento de la plantilla del Operativo en un 41%, al pasar de 279 efectivos al inicio de la legislatura a los 412 actuales.

El consejero ha puesto en valor la "pionera" orden de la Consejería que regula las quemas controladas y prescritas de Cantabria, que desde que puso en marcha hace un año ha permitido la autorización de 6.125 quemas en terrenos rústicos fuera de monte, y 185 quemas controladas de matorral en monte, lo que supone 1.734 hectáreas en 19 municipios de la región, entre los que se encuentran los que tienen una mayor incidencia de incendios: Luena, Arredondo, Soba, San Pedro del Romeral, Guriezo o Vega de Pas.

Además, se ha habilitado a través de cursos (26 ediciones) a 484 personas para las quemas, y en lo que resta de año está previsto realizar otros cinco cursos y sumar, al menos, otras 154.

La Consejería ha destinado en esta legislatura más de 1,5 millones en ayudas las entidades locales propietarias de Montes de Utilidad Pública para invertir en prevención de incendios, además de las ayudas para inversiones colectivas que a razón de 750.000 euros al año también permiten que las entidades locales realicen actuaciones de eliminación de matorral y mejora de pastos.

En los presupuestos para 2023, la Consejería ha previsto en materia forestal 6,7 millones de euros, un 11,55% más que en 2022.

PREVENCIÓN Y ALIANZAS

Con el fin de impulsar la prevención de incendios mediante la dinamización de la gestión forestal y el desarrollo rural, a lo largo del próximo año se aprobarán el nuevo Plan Forestal de Cantabria y el Plan de Movilización de los Recursos Forestales de Cantabria.

En este sentido, Blanco ha destacado el esfuerzo económico de su departamento para apoyar las actuaciones de prevención de incendios que realicen los propietarios de los montes, con las ayudas anuales que la Consejería convoca para inversiones colectivas con financiación FEADER, con una cuantía media anual de 750.000 euros, que se va a incrementar para el próximo periodo hasta 1,7 millones , lo que "va a permitir que las entidades locales, destinatarias de estas ayudas, puedan priorizar el destino de esos fondos para realizar los desbroces".

Además, las ayudas para la prevención destinadas a las entidades locales han supuesto un total de 1,6 millones ya concedidos en esta legislatura, para que las entidades locales puedan eliminar matorral.

En materia de vigilancia, el consejero ha asegurado que su departamento va a seguir colaborando con la Guardia Civil y la Fiscalía de Cantabria en la prevención y en la identificación de los presuntos causantes y ha avanzado que la Consejería va a reforzar las capacidades de investigación de las causas de incendios del Operativo con la creación de los citados grupos de investigación.

Medidas que se complementarán con la creación de una página web para dar información a la sociedad relativa a los incendios forestales, que, tal y como ha explicado Blanco, "ofrecerá información actualizada de manera diaria de las situaciones de riesgo de incendios y de las prácticas que se limitan o prohíben como consecuencia del riesgo, así como información periódica de los incendios producidos, su extensión y localización".

840 INCENDIOS ESTE AÑO

Con datos provisionales hasta el 31 de octubre, el consejero ha informado de que en Cantabria se han producido este año 840 incendios forestales, con una superficie estimada de 9.957 hectáreas quemadas, siendo 1.520 de arbolado. De total, 141 se han registrado en el mes de octubre y de ellos, más de la mitad, en concreto 72, en el periodo en el que estuvo activado el INFOCANT, quemando casi 2.200 hectáreas, el 22% del total del presente año hasta la fecha.

"Los datos no son buenos, evidentemente, pero no debemos perder de vista las circunstancias meteorológicas de este año y su relación con los incendios, ya que en 2022 en España se han batido todos los récords de la última década en cuanto a hectáreas quemadas, más de 240.000", ha lamentado Blanco, quien ha advertido que en los últimos años se ha producido un incremento importante en la frecuencia de incendios de mayores dimensiones y en mayor número, pero que no es algo exclusivo de Cantabria.

Y a pesar de las temperaturas elevadas, sequía o viento sur que favorecen la propagación, ha remarcado "el inicio del fuego está, en la inmensa mayoría de los casos, en la mano del hombre".