El 90,1 por ciento de los cántabros mayores de 55 años asegura tener distintos espacios en el hogar destinados a la separación de los residuos, según el estudio 'Hábitos de la población española ante el reciclaje' de Ecoembes.
El mismo estudio indica que el 82,7 por ciento de los encuestados en Cantabria declara disponer de un espacio en su casa para depositar los envases en el cubo amarillo (envases de plástico, latas y briks).
Así, los hogares cántabros cuentan con una media de tres cubos o bolsas (3,1), en los que separar los residuos y darles una segunda vida a través del reciclaje.
Atendiendo a razones sociológicas, el informe refleja que la separación de residuos es un hábito "muy extendido" en la comunidad en todas las franjas de edad.
Sin embargo, el ejemplo en materia de reciclaje lo dan los mayores de 55 años (90,1%). A continuación, se sitúan los adultos de 35 a 54 años (79%) y los jóvenes de 16 a 24 años (74,9%) y a la cola se encuentran la franja de 25 a 34 años, con un 73,2 por ciento de recicladores habituales.
"Los resultados de este estudio son un reflejo de cómo el reciclaje es un hábito que lleva ya muchos años asentado en la sociedad cántabra y con el que los ciudadanos ponen en práctica su compromiso ambiental", ha señalado el gerente de Ecoembes en Cantabria, Fernando Blázquez.
En cuanto al grupo social más concienciado con el reciclaje en Cantabria, los separados son el colectivo más comprometido con la separación de residuos domésticos (100%), seguidos por los casados (87,7%) y los viudos (87,2%).
Respecto al género, las mujeres se encuentran unos puntos por encima de los hombres. En concreto, el 89,9 por ciento de las mujeres cántabras asegura tener en sus hogares más de un espacio en casa para separar y tirar los residuos, y uno de ellos destinado al contenedor amarillo. Una cifra que en el caso de los hombres se sitúa en el 74,9 por ciento.
Los resultados del estudio también concluyen que la sociedad cada vez tiene menos dudas a la hora de depositar los residuos en el contenedor adecuado. Así, el 87 por ciento de los encuestados extremeños dicen tener claro los del contenedor azul.
En el caso del amarillo, identifican más claramente con este contenedor las botellas de plástico, las tarrinas, los briks y los envoltorios de plástico, mientras que hay otros residuos, como los aerosoles y las bandejas de corcho blanco, que también deben depositarse en este contenedor pero que todavía generan dudas.
