Las obras de mejora que está realizando el Ayuntamiento de Reinosa en el Teatro Principal finalizarán a principios de verano.
Así lo ha informado este lunes el Consistorio en un comunicado, en el que ha indicado que la actuación, adjudicada a la empresa Casas, Naves y Locales S.L., pretende adecuar las instalaciones a la Ley de Garantía de los Derechos de las Personas con Discapacidad, subsanar las deficiencias del área de la cubierta y habilitar nuevos espacios en el patio de butacas y en el escenario que aporten una mejor visión a los espectadores.
La instalación de un ascensor es una de las mejoras más relevantes de un proyecto, con un presupuesto superior a los 200.000 euros, y que vendrá a facilitar los accesos a un edificio cuya entrada principal "se realiza a través de un soportal de considerable altura",
Este ascensor tendrá tres paradas y su habilitación conllevará la eliminación de una de las escaleras de acceso y una de las dos escaleras que comunica la planta principal con el anfiteatro.
El Teatro Principal de Reinosa, de planta rectangular, adopta en su interior una configuración denominada 'a la italiana', es decir, cuenta con una sala de butacas en ligero desnivel, palcos situados en torno a ella, un anfiteatro de asientos en el piso superior y un foso de orquesta ubicado junto al escenario que ha sido "infrautilizado" por lo que se eliminará para "despejar el espacio de paso en el patio de butacas".
Otro aspecto sobre el que se va a actuar es la visión del escenario desde los anfiteatros laterales. Así, desaparecerá el recrecido del nivel 1 de los mismos y se dará una nueva orientación a las butacas, de forma que queden enfrentadas al propio escenario.
Los camerinos, por su parte, también serán objeto de obras de conservación y mantenimiento.
El paso del tiempo unido a la exposición a la severa climatología de la ciudad han originado una serie de patologías en la cubierta principal del Teatro reinosano que han afectado, tal y como señala el proyecto de la intervención, al cordón de agua que conforma la cumbrera, al lucernario y los revestimientos de las chimeneas de ventilación.
La obra prevé su sustitución y reparación al igual que lo hace con la carpintería y la cerrajería exterior y la pintura de la fachada.
La pintura plástica existente se ha revelado como "no compatible" con el muro de mampostería, lo que ha propiciado que, en algunas zonas, se hayan producido desprendimientos de pintura y parte del revestimiento del zócalo. A ello se unen los efectos del frío extremo en invierno y el sol del verano, por lo que se precisan trabajos de mantenimiento en el exterior.
