Varias boleras de Santander han reabierto para que las peñas puedan iniciar sus entrenamientos. Se trata de la Mateo Grijuela, que abrió tras ser desinfectada y con la aplicación de los protocolos sanitarios, mientras que la Uco Lastra está siendo acondicionada.
Además, las boleras descubiertas del Complejo Ruth Beitia están a disposición de los equipos que lo soliciten, informa el Ayuntamiento en una nota.
La concejala de Deporte, María Luisa Sanjuán, ha mostrado su "satisfacción" por la vuelta a la actividad en estas instalaciones municipales.
En este sentido, ha indicado que la Liga Apebol comenzará en un mes, el próximo 2 de julio, y una vez que Cantabria ha entrado en la fase 2 de la desescalada por la pandemia del coronavirus han puesto en marcha las boleras para que las peñas puedan entrenar.
Así, el martes, la Peña Bolística Peñacastillo volvió a sus entrenamientos en la Bolera Municipal Mateo Grijuela, donde se han implantado medidas sanitarias, como jaboneras con geles hidroalcohólicos y alfombras de desinfección en los accesos.
También se han consensuado medidas a adoptar por los deportistas en base a los protocolos marcado por las federaciones Española y Cántabra de Bolos. Previamente, se han desinfectado las instalaciones y se ha acondicionado la bolera, que requería "alguna mejora por el desuso".
Además, se están realizando también mejoras y mantenimiento en la bolera cubierta Uco Lastra de Cueto y se han limpiado y acondicionado las boleras al aire libre situadas dentro del Complejo Deportivo Ruth Beitia.
Estas últimas están a disposición de las peñas de la ciudad "por si no pueden acceder a su bolera habitual al no poder garantizar las medidas de control de aforo o de carácter sanitario que marcan los protocolos".
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