La Asociación Cántabra de Empleados de la Madera y del Comercio del Mueble (ACEMM) ha reclamado al Gobierno de Cantabria la apertura de todos los comercios de mobiliario de más de 400 metros cuadrados los sábados, por considerar que reúnen todas las condiciones de seguridad e higiene para los clientes.
En un comunicado, la asociación señala que en este tipo de establecimientos, que incluyen muebles, descanso, decoración y textil, la mayoría de los metros cuadrados corresponden a exposición y no son instalaciones en las que haya masificación en la afluencia de clientes ya que se requiere una atención personalizada por parte del vendedor.
Por ello, ACEMM entiende que no habría que limitar su apertura los fines de semana, como ha establecido el Ejecutivo para comercios de más de 400 metros cuadrados, ya que las tiendas de muebles "no suponen riesgo para el cliente" y su cierre causa un "grave perjuicio" para empresas que, en su mayor parte, son familiares y dan un "servicio esencial" en las localidades en las que se encuentran.
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Al respecto, señala que aportan productos "de primera necesidad", como colchones, sillones para personas de edad avanzada, muebles para el trabajo en casa y otros necesarios por las "prolongadas estancias" en el hogar debido a las medidas restrictivas implantadas por la crisis sanitaria.
Por estos motivos, ACEMM pide que se modifique esta medida para que estos comercios puedan ofrecer su servicio los sábados, ya que "es cuando se cierran la mayoría de los presupuestos y por tanto el cierre de estos establecimientos en esos días provocará una importante caída de ventas que compromete la viabilidad de estos negocios".
En este sentido, considera que sería "más oportuno" limitar aforos y no por superficie, ya que "además de prevenir los contagios, afectaría en menor medida a las pymes".
