Torrelavega retoma su campaña para sensibilizar sobre los efectos negativos de la pirotecnia

El Ayuntamiento de Torrelavega ha puesto en marcha de nuevo la campaña 'No a la pirotecnia', que viene realizando desde 2017 para concienciar y sensibilizar a los ciudadanos sobre el uso de la pirotecnia especialmente en las fiestas navideñas. Así, un año más se ha limitado su lanzamiento en el municipio a una hora tras las campanadas.

El concejal de Sanidad, José Luis Urraca, ha presentado este lunes en rueda de prensa la campaña acompañado por la gerente de APTACAN Autismo Cantabria, Estela Canales; Paula Abascal, del Refugio Canino Torres, y Lara Torre, de Gatucos Torrelavega.

El edil ha señalado que esta iniciativa "no es de prohibición", sino que pretende "concienciar y sensibilizar" a los ciudadanos porque "algo que a algunas personas les puede hacer disfrutar, para otros no es divertido, porque les causa todo tipo de molestias y males". Así, el objetivo es que "piensen también en los demás" antes de hacer uso de artefactos pirotécnicos.

En Torrelavega, el uso de la pirotecnia esta regulado y sujeto a autorización municipal. Este año, como en los anteriores, se permitirá el uso de pirotecnia en Nochevieja una hora tras las campanadas, desde las 00.00 hasta la 1.00 de la madrugada de Año Nuevo.

A pesar de ello se pide hacer "un ejercicio de empatía" y ponerse en el lugar de ancianos, bebés, enfermos o personas autistas, "que lo pasan mal", así como de los animales, "que no saben lo que está ocurriendo y sufren nauseas, taquicardias, aturdimiento, huidas...".

Desde APTACAN han explicado que muchas personas autistas tienen hipersensibilidad acústica, con lo que los sonidos fuertes e inesperados les pueden provocar ansiedad y ataques de pánico. "Una persona aturdida, asustada, puede salir corriendo, le pueden atropellar, se puede perder", ha advertido la gerente de la asociación, para quien la pirotecnia causa en estas personas un sufrimiento "innecesario".

Así, Canales ha apelado a la empatía y ha animado a otros ayuntamientos a seguir el ejemplo de Torrelavega y limitar el lanzamiento de pirotecnia.

Por su parte, la representante de Gatucos Torrelavega ha subrayado los efectos que supone en los felinos teniendo en cuenta que, "si una persona tiene un nivel auditivo de unos 20.000 hercios y los perros tienen unos 40.000, los gatos tienen entre 50.000 y 100.000 hercios".

Entre las consecuencias, ha señalado que se producen taquicardias, algunos pueden estar varios días sin comer y beber por el estrés, se autolesionan, emprenden huidas en las que pueden perderse o sufrir accidentes, etcétera.

Torres también ha pedido que se piense en los gatos callejeros, en las colonias felinas, de las que hay censadas un centenar en Torrelavega, ya que "ellos no tienen un sitio donde resguardarse, donde esconderse", como si pueden tener los gatos domésticos.

Finalmente, la representante del Refugio Canino Torres ha recalcado que Nochevieja "es el peor día del año para los perros, el día en el que más perros desaparecen", como han corroborado cada Navidad.

"El día 1 se acerca un montón de gente a la protectora porque se les ha perdido el perro, otros porque se han encontrado un perro... y hay muchos que desgraciadamente no aparecen nunca o tristemente aparecen fallecidos", ha lamentado. Por eso, Abascal ha cuestionado si por una "diversión de cinco minutos de tirar unos petardos merece la pena que un animal pueda desaparecer o fallecer".

También ha mencionado a las aves como "las gran olvidadas" que también sufren la pirotecnia. Como ejemplo ha citado los estorninos, "que son súper sensibles y el día 1 aparecen muchos fallecidos debajo de sus nidos".