Lope de Vega se reabre al tráfico la próxima semana y las rampas funcionarán en julio

photo_camera CANTABRIA.-Santander.- Lope de Vega se reabre al tráfico la próxima semana y las rampas funcionarán en julio

Este martes han empezado a colocarse los primeros elementos mecánicos de las rampas que unirán el Paseo de Pereda con General Dávila, y que entrarán en servicio en su totalidad el próximo mes de noviembre.

Pero antes, para la segunda quincena de julio, estarán ya en funcionamiento las de la calle Lope de Vega, que van de Daoíz y Velarde a Santa Lucía, al ser el tramo más avanzado de las obras, y que permitirá reabrir esta vía al tráfico la próxima semana.

Estos plazos han sido ofrecidos este martes por el concejal de Medio Ambiente de Santander, José Antonio Quirós, durante una visita a los trabajos con motivo de la instalación de los primeros elementos mecánicos, labores que se acometerán entre hoy y mañana.

En concreto, en la calle Lope de Vega van dos rampas, de unos 33 metros de largo cada una, y divididas ambas en tres fragmentos de entre 10 y 11 metros y con un peso que oscila entre las 6 y 7 toneladas, para cuya colocación se precisa una grúa de 66 toneladas.

El montaje se está realizando por piezas y ha comenzado por la rampa más próxima al Paseo de Pereda -entre las calles Daoiz y Velarde y Bonifaz- y continuará por la segunda -desde Bonifaz hasta Santa Lucía-.

Una vez instalados los elementos mecánicos, comenzará el montaje del sistema electrónico y, en paralelo, continuarán los trabajos de aglomerado del vial.

La zona, cortada al tráfico con motivo de estos trabajos, que se empezaron a ejecutar el pasado otoño, se reabrirá a la circulación a principios de junio, es decir, la próxima semana.

Para entonces ya estará asfaltada y pintada la calzada, y quedarán pendientes labores de jardinería y la instalación del mobiliario urbano, así como las tareas de puesta a punto de las rampas. Mes y medio después, entrarán en servicio las rampas mecánicas entre Daoíz y Velarde y Santa Lucía.

OTROS DOS TRAMOS DEL PROYECTO

Mientras tanto, proseguirán las obras en los dos tramos que completan el proyecto y que ya están en ejecución: desde la iglesia del Carmen, de la calle del Sol a Santa Teresa, y entre Prado San Roque y la finca de Jado.

Esta segunda parte de los trabajos concluirá en noviembre, es decir, aproximadamente un año después del inicio de esta actuación, con un presupuesto global de 1,35 millones de euros, ha recordado el edil.

El responsable de Movilidad Sostenible ha detallado que en la zona de Entrehuertas está prevista la instalación de una escalera mecánica, una rampa y un ascensor.

En este momento ya se han finalizado los muros del núcleo del ascensor y los fosos para la ubicación de la rampa, y los elementos mecánicos de cada uno de ellos se colocarán en el mes de septiembre.

Hasta esa fecha, se trabajará en la ejecución de la pasarela que unirá la calle Santa Teresa con la zona de desembarque del ascensor. Y también se construirán los fosos para la escalera mecánica que partirá de la calle Sol.

Por último, en la zona de la Finca Jado, donde se contempla la instalación de una escalera mecánica, se están terminando ya los fosos y la previsión es que el montaje de la escalera se realice en la primera quincena de agosto.

Las obras de conexión del Paseo de Pereda y General Dávila a través de elementos mecánicos, que están siendo ejecutadas por Ascan, permitirán salvar un desnivel total de 75 metros a través de tres rampas y dos escaleras mecánicas, además de un ascensor, que complementarán las escaleras que ya existen en el Grupo El Carmelo.