El Ayuntamiento de Santander ha abierto la inscripción para la quinta edición del concurso nacional 'Dilo en buen español', dirigido a escolares de entre 10 y 13 años y que este año tendrá como tema 'Un día en la bahía más bonita del mundo'. El plazo de entrega de los relatos finalizará el 23 de abril, coincidiendo con el Día del Libro.
El objetivo de este certamen, dirigido a alumnos de cualquier centro escolar, es "fomentar el buen uso del idioma español, la correcta ortografía y el buen léxico" entre los alumnos, ha señalado la concejala de Salud, Noemí Méndez, que ha presentado en rueda de prensa los detalles del concurso.
Según ha dicho, de esta manera se pretende promover la escritura frente al lenguaje utilizado con las nuevas tecnologías, en las que se escribe rápido, con abreviaturas o incluso imágenes en vez de palabras.
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Como novedad en esta edición, se concederán dos premios: un ordenador portátil valorado en 1.000 euros para el alumno que mejor relato haya escrito, y cinco tablets por un valor máximo de 1.000 euros para el colegio con el mejor nivel de trabajos.
Los relatos presentados deben tener una extensión de entre 200 y 300 palabras y en ellos se puede abordar tanto la bahía de Santander, como una ficticia o de otra ciudad.
La finalidad, según ha explicado Méndez, es que los alumnos busquen información sobre las bahía, cuáles existen en el mundo e investiguen sobre ello.
Los relatos se tienen que entregar de forma online a través de la página web www.diloenbuenespañol.es, donde se recogen los formularios de isncripción, así como toda la información sobre los participantes, la obra presentada y la autorización paterna.
Los ganadores se darán a conocer en el mes de mayo y el jurado estará compuesto por cinco miembros cualificados en el ámbito de la filología española. El año pasado formaron parte del jurado personas relacionadas con la literatura de la ciudad y en esta quinta edición el Ayuntamiento quiere integrar en el mismo a otras de nivel nacional.
La edil ha señalado que los relatos no se publican porque el conjunto de los presentados no suma la cantidad necesaria para publicar un libro, dado que las obras suelen ser "muy cortas". Sin embargo, ha recordado que el año pasado los ganadores hicieron una exposición de sus relatos.
Por otro lado, también ha puesto en valor que el concurso es nacional con el fin de que se genere "un flujo de turismo" en la ciudad y que Santander sea conocida por este tipo de actividades literarias.
El ganador del certamen del año pasado fue una niña de Santiago de Compostela, cuyo premio se adaptó y se convirtió en un viaje para conocer Santander. "Por la pandemia la niña no pudo hacer el viaje, pero está reservado para cuando pueda acudir", ha dicho.
