El Grupo Municipal Regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha instado este miércoles al equipo de Gobierno (PP) a cumplir el acuerdo plenario de enero de 2020 en el que se acordó, a instancias del PRC, crear la figura del Defensor del Vecino para garantizar la protección de los derechos de los ciudadanos en las desavenencias que pudieran surgir con la Administración local y canalizar de manera formal sus quejas.
Su portavoz, Felipe Piña, ha explicado que la motivación para reclamar de nuevo el cumplimiento de esta moción viene avalada por la "avalancha de quejas de vecinos desprotegidos" que recibe su grupo municipal y que, en su gran mayoría, son "cuestiones que ya han sido remitidas previamente al equipo de Gobierno y que no han recibido ningún tipo de respuesta por su parte".
En un comunicado, Piña ha recordado que esta propuesta, "rechazada por el PP" --entonces en minoría--, pedía regular esta figura con un estatuto propio en el que se defina su régimen jurídico, funciones y competencias, con el objetivo de "ampliar la protección y defensa de los derechos y libertades de los vecinos de Santander".
También pretendía dar cuenta anual ante el Pleno de las gestiones realizadas a petición de los vecinos, aportando sugerencias y recomendaciones para mejorar el funcionamiento de los diferentes entes municipales.
Piña ha subrayado que esta petición fue tratada en diversas reuniones por parte del grupo de trabajo de modificación del Reglamento de Participación Ciudadana, que vio su trabajo "inconcluso" en 2021 y "no ha vuelto a reunirse desde entonces".
Por ello, los regionalistas también han solicitado que, en el plazo de tres meses, se vuelva a convocar la mesa para la revisión de dicho reglamento, con el fin de "retomar el trabajo que la mayoría absoluta sepultó".
El regionalista también ha preguntado a la alcaldesa, Gema Igual, "por qué tiene tanto miedo a la participación ciudadana" y "no regula de una vez por todas" esta figura, destinada a defender y favorecer la participación de los vecinos.
