La Policía Local de Santander ha detenido al conductor de una furgoneta que dio positivo en consumo de alcohol tras chocar contra una moto e irse sin facilitar los datos a la otra parte.
Los hechos sucedieron el viernes, a las 22.15 horas, en la bajada de Polio, cundo colisionaron una furgoneta y una motocicleta ocasionándose daños materiales. Tras el impacto, el conductor de la furgoneta se marchó del lugar sin facilitar sus datos a la parte contraria, dejando el vehículo estacionado y cerrado en la calle Libertad.
Posteriormente los agentes localizaron al conductor de la furgoneta en la calle Los Portuarios, donde le solicitaron la realización de la prueba de la alcoholemia, que resultó positiva al superar en más del doble la tasa permitida de alcohol.
También el viernes, sobre las 23.30 horas, fue detenida una conductora en la calle Ernest Lluch después de que la Policía Nacional solicitara a la Local que la realizase la prueba de alcoholemia pues estaba haciendo maniobras de estacionamiento irregulares. La prueba resultó positiva pues superaba en más del triple la tasa permitida.
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El sábado, a las 17.00 horas, en un control en la avenida Cardenal Herrera Oria los agentes solicitaron la documentación al conductor de unturismo que había perdido la vigencia del permiso de conducción porque no tenía puntos y no había realizado el curso de sensibilización y reeducación vial, por lo que fue detenido.
En el mismo lugar, a las 20.40 horas, los policías solicitan la documentación al conductor de un vehículo que circulaba de manera irregular, a trompicones, y que no tenía permiso de conducir. También se identificó al copiloto, que dijo que el conductor era su amigo y que le estaba enseñando a conducir. Se instruyeron diligencias contra ambos por sendos delitos contra la seguridad vial, concretamente contra el conductor por no haber obtenido el permiso de conducción y contra el copiloto por ser el cooperador necesario para el hecho delictivo.
Finalmente a las 2.15 horas de ayer domingo, en el Paseo de Canalejas, los agentes solicitan la realización de la prueba de alcoholemia al conductor de un turismo al que habían visto circulando de forma irregular y fuera del horario establecido por las restricciones COVID-19. El hombre superaba en más del doble la tasa permitida de alcohol, por lo que fue detenido.
