La Guardia Civil ha detenido a una pareja de colombianos, vecinos de Santander, por un presunto delito de tráfico de drogas y ha desmantelado un importante punto de introducción, preparación y distribución de cocaína a la capital y otras poblaciones cercanas.
En la operación, denomina 'Muniphi', se ha localizado tanto la 'guardería' de la droga, como el vehículo con doble fondo con el que los detenidos, un hombre de 56 años, que ha ingresado en prisión, y su pareja, una mujer de 47, la introducían en Cantabria, desde Murcia.
En los registros practicados en el vehículo, vivienda y un garaje utilizado como 'guardería', se han intervenido más de 400 gramos de cocaína, con la que se podía haber obtenido unas 1.500 dosis; sustancia de corte, cerca de 300 gramos de cogollos de marihuana, cuatro balanzas y fármacos para la disfunción eréctil.
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La investigación comenzó a finales del año pasado, cuando la Guardia Civil detectó a un hombre natural de Colombia que podía estar dedicándose a introducir en Cantabria importantes cantidades de cocaína y que ya había sido detenido en el año 2010 en una operación antidroga de este Cuerpo.
En las vigilancias se constató un trasiego inusual de personas en el entorno de su vivienda en la calle Los Portuarios de Santander, así como desplazamientos con un vehículo, con el que realizaba múltiples y rápidos contactos, todo ello compatible con el tráfico de drogas.
También se detectó que el sospechoso accedía a un garaje situado en la calle La Universidad de Santander, donde se sospechaba que podía tener la "guardería" de la droga.
Las pesquisas pusieron igualmente al descubierto que el hombre realizaba viajes a Murcia, posiblemente para la adquisición de cocaína.Así, tras abandonar Cantabria el 19 de julio, presumiblemente con destino a Murcia, a su regreso, dos días más tarde, se le interceptó en la localidad de Miengo y se realizó el registro de su vehículo.
Aunque los agentes no detectaron droga a simple vista, ésta se encontró en el doble fondo del vehículo, después de que un perro detector de estupefacientes de la Guardia Civil marcara incesantemente la zona del asiento del conductor.
En este doble fondo había una caja metálica que tuvo que ser forzada para su apertura y en cuyo interior había un paquete con cocaína. El habitáculo estaba preparado para traer unos tres kilos de dicha sustancia por viaje.
Tras este hallazgo, se interceptó saliendo de la vivienda vigilada a la pareja del ya detenido, quien escondía entre su ropa interior cocaína y dinero, procediéndose igualmente a su detención.
En el posterior registro a la vivienda se localizaron casi 300 gramos de cogollos de marihuana, sustancia de corte de la cocaína y balanzas. Y en el del garaje, encontró más cocaína y se comprobó que estaba habilitado para el secado, preparación y dosificación de la droga. En este lugar también se hallaron fármacos para la disfunción eréctil.
La operación ha estado dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Santander, con la coordinación de la Fiscalía Especial Antidroga.En ella han participado miembros de la Guardia Civil pertenecientes al Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA), con apoyo de la USECIC y del Servicio Cinológico con un perro detector de drogas.
