Ayuntamiento y CHC terminan los trabajos para la conservación de arroyos en Santander
El Ayuntamiento de Santander y la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) han finalizado ya los trabajos para la recuperación y mantenimiento de los cauces de dominio público en el municipio que se iniciaron el pasado mes de agosto.
La concejala de Medio Ambiente, Margarita Rojo, ha visitado este martes la zona del Canal de Raos, última de las áreas donde se han llevado a cabo las actuaciones dentro del plan coordinado entre ambas administraciones.
A través de él, también se han desarrollado intervenciones en los arroyos de La Tejona, Irma o de Otero y La Regata, que suman más de 5 kilómetros de longitud (5.677 metros) y representan una inversión total de 95.327 euros.
Estas labores contribuyen a la mejora del estado ambiental y a la reducción del riesgo de inundaciones en diversos puntos de la capital cántabra.
Y es que los trabajos han permitido adecuar las condiciones de los cauces, eliminar la vegetación invasiva o descontrolada, retirar residuos, y preservar el flujo natural del agua.
Las labores, ejecutadas por el organismo de cuenca, son fruto de un convenio con el Ayuntamiento, que incluye un mantenimiento que se desarrollará durante cuatro años, ha informado el Ayuntamiento.
DETALLES DE LAS ACTUACIONES
En el Canal de Raos, situado en Peñacastillo, se actuó sobre un tramo de 1.173 metros entre el 10 y 23 de septiembre y los trabajos se centraron en la retirada de vegetación arbustiva, en la eliminación de ejemplares de especies invasoras y en la recogida de residuos. También se procedió al dragado del cauce.
El arroyo de la Tejona, en San Román de la Llanilla, fue objeto de actuaciones a lo largo de 1.941 metros, de los cuales 1.227 correspondieron a tramos urbanos y 714 a tramos rurales. Se retiró vegetación arbustiva y también residuos y se efectuó un dragado para recuperar la capacidad de desagüe, entre el 11 de agosto y el 2 de septiembre y también con medios manuales y mecánicos.
En el arroyo de la Regata, en Monte, se actuó sobre un tramo rural de 1.173 metros, y tras la eliminación de matorral y residuos, se mejoró la sección del mismo mediante la extracción de sedimentos, entre el 20 de agosto y el 5 de septiembre.
Finalmente, en el arroyo de Otero o de Irma, situado en Rucandial, se trabajó en un tramo rural de 1.390 metros, con especial incidencia en 565 metros comprendidos entre el puente peatonal y la autovía S-20, donde los márgenes erosionados provocaban taponamientos.
Allí se retiró vegetación, se eliminaron residuos y se efectuó un dragado con retroexcavadora para restituir la capacidad de desagüe. Los trabajos se realizaron entre el 21 de agosto y el 16 de septiembre con apoyo de maquinaria.