El oso avistado en Campoo regresa a su medio natural tras activarse el protocolo de intervención
El oso pardo desorientado que fue avistado a primera hora de este lunes en la zona de Reinosa-Campoo de Enmedio ha regresado ya a su medio natural.
Así lo ha confirmado la Dirección General de Montes y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria, que mantiene activo el protocolo de intervención con osos desde ayer por la mañana para garantizar la seguridad tanto del ejemplar como de la población.
El animal, un oso pardo de aproximadamente tres años de edad y unos 150 kilos de peso, fue visto entre las localidades de Reinosa y Matamorosa, en las inmediaciones de instalaciones industriales, lo que provocó la rápida movilización de un dispositivo integrado por agentes del Medio Natural, técnicos de la Dirección General de Montes y Biodiversidad, Fundación Oso Pardo, y efectivos del Seprona de la Guardia Civil.
Según ha informó ayer el director general de Montes y Biodiversidad, Ángel Serdio, a las 11:00 horas del lunes se descartó que el ejemplar permaneciera en las proximidades de la zona industrial, donde fue avistado.
Los agentes del Medio Natural, apoyados por perros especializados en rastreo, han seguido los movimientos del animal, logrando cortar su rastro en varias ocasiones, y todo apunta a que el oso se ha dirigido hacia los montes y zonas boscosas situadas al sur del Pantano del Ebro.
Los perros de rastreo empleados en el dispositivo han confirmado que el rastro del oso se pierde en las áreas de monte, lo que refuerza la hipótesis de que el ejemplar ha regresado a su hábitat natural.
A pesar de ello, la Dirección General de Montes mantiene activo el dispositivo, en el que también participa personal veterinario, para confirmar en las próximas horas que el animal ha abandonado definitivamente la zona y que no supone ningún riesgo para las personas.
Desde la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación se recuerda a la ciudadanía que, en caso de encuentro fortuito con un oso en una vía de circulación, no se debe perseguir al ejemplar desde un vehículo, ya que esta acción podría generar situaciones de riesgo y provocar un elevado nivel de estrés al animal.